Desde que en febrero último se conoció que Argentina y Chile chocarán por los cuartos de final de la Zona Americana I de la Copa Davis, a los fanáticos del tenis les resulta imposible rememorar el escandaloso capítulo que se vivió 18 años atrás en el por entonces Parque 0'Higgins de Santiago, luego rebautizado como Movistar Arena.
Es que aquel violento antecedente, ocurrido en el primer día de partidos (7 de abril del 2000), quedó marcado como el episodio más lamentable en la historia del máximo certamen de tenis por países.
El 4-1 que la Selección Argentina le propinó al elenco trasandino por las Eliminatorias rumbo a Mundial Corea-Japón 2002 se encargó de calentar el clima previo a la serie, válida por el repechaje del Grupo Mundial de la "Ensaladera". Y todo terminó en escándalo...
Tras los abucheos al himno argentino y el triunfo del local Marcelo Ríos ante Hernán Gumy -6-4, 6-3, 4-6 y 6-1-, la situación se desmadró durante el segundo encuentro, protagonizado por Nicolás Massú -actual capitán de Chile- y Mariano Zabaleta.
"Había mucha gente que no era del ambiente del tenis. Sentí que había mucha bronca y una rivalidad exacerbada y ni siquiera era un partido de Grupo Mundial", recordó Gumy tiempo después de la batalla campal.
Enardecido por la victoria inicial y un tanto entonado por la cerveza que vendían en las tribunas del estadio, el público chileno se comportó indebidamente y hasta provocó que a Massú le descontaran cuatro puntos.
Pero en el cuarto set llegó lo peor: Zabaleta, con dos sets y un quiebre a favor, agredió a un ballboy -alcanzapelotas- por ocultar un proyectil que habían lanzado desde la tribuna y las naranjas, sillazos y otros objetos no tardaron en aparecer en escena.
"Habían hecho un estadio impresentable. Estaba sin terminar, era una obra en construcción y todo eso conspiró para que terminara en un verdadero escándalo", opinó el periodista especializado en tenis, Guillermo Salatino, en el documental que se realizó años atrás sobre el recinto que albergó el cruce.
Pese a que el por entonces presidente de la Comisión de Copa Davis, el español Juan Margets, y el árbitro de turno, el dominicano Toni Hernández, determinaron jugar en el mismo lugar sin público los cuatro partidos pendientes los dos días siguientes, los capitaneados por Alejandro Gattiker no se presentaron a la reanudación argumentando que las garantías de seguridad no estaban dadas.
Asimismo, la delegación albiceleste entregó una licencia médica psicológica, por lo que el juez dio como ganador a Chile 2-0 por ausencia el 8 de abril.
La Federación Internacional de Tenis (ITF, por sus siglas en inglés) ratificó tiempo después el resultado a favor de los chilenos pero, en primera instancia, castigó a los ganadores con la prohibición de jugar de local en la Copa Davis antes de 2003. No obstante, la pena fue reducida hasta inicios de 2002.
En materia económica, la Federación de Tenis de Chile fue multada con 47 800 dólares por la violencia inusitada que protagonizó su público, mientras que la Asociación Argentina de Tenis (AAT) fue multada con 26 000 dólares por no respetar la decisión del juez y retirarse de la competencia.
A dar vuelta la página
El renovado estadio Aldo Cantoni de San Juan albergará el esperado duelo entre Argentina y Chile, a disputarse entre este 6 y 7 de abril.
Mientras que por el lado de Argentina se presentarán Diego Schwartzman, Guido Pella, Nicolás Kicker, Máximo González y Guillermo Durán, Chile intentará dar el golpe de la mano de Nicolás Jarry, Christian Garín, Tomás Barrios, Hans Podlipnik y Alejandro Tabilo.
Como un gran gesto para evitar hechos bochornosos como los que se susitaron 18 años atrás, ambas federaciones lanzaron una campaña de concientización en las redes sociales.
¡Somos rivales, no enemigos!