Un motín en una prisión de Venezuela dejó un saldo de 68 personas muertas y al menos 30 heridas. El trágico hecho se dio este miércoles en una cárcel de la Policía de Carabobo, en el centro del país caribeño, según informaron fuentes extraoficiales y medios de prensa locales.
Este jueves, el fiscal general de Venezuela, Tarek Saab, confirmó en Twitter el número de víctimas y anunció una investigación. Entre los muertos habría dos mujeres que visitaban a familiares.
"El Ministerio Público informa a la opinión pública que ante los terribles hechos acaecidos en la Comandancia de la Policía del Estado Carabobo, donde por un presunto incendio fallecieron 68 personas, hemos designado 4 fiscales para esclarecer estos dramáticos hechos", dijo Saab en Twitter.
A su vez, en otro tuit señaló que tras las "indagaciones preliminares", son 66 los hombres muertos así como dos mujeres "que se encontraban en calidad de visitantes" y que a todos "se les realizaron los respectivos protocolos de autopsia y entrega respectiva de los cuerpos a sus familiares".
La organización local Una Ventana a la Libertad, que defiende los derechos humanos de los reos, indicó en un comunicado que, según versiones extraoficiales, el incidente ocurrió cuando unos detenidos despojaron de su arma a un guardia, que resultó herido en la pierna. En medio de la riña se generó un incendio que alcanzó las colchonetas de las celdas, lo que expandió rápidamente el fuego.
Cinco camiones de bomberos arribaron para socorrer a los policías y reclusos, y también llegaron varias ambulancias, según constató la AP.
Después del motín, varias decenas de familiares -ayer era día de visitas conyugales, según el diario El Carabobeño- aguardaron frente a la comandancia policial en espera de información, una situación que se tornó violenta y derivó en lanzamiento de gases lacrimógenos por parte de una veintena de efectivos de la policía.
Madres, esposas, hermanas e hijos se mostraron desesperados por la falta de información, y destacaron que había varios heridos por quemaduras y asfixia.
"¡No me han dicho nada!¡Queremos información de nuestros familiares!", señaló una mujer desesperada en la emisora NTN24, citada por la agencia de noticias DPA. Su hijo estaba detenido en el comando de la policía de Carabobo.
Según medios venezolanos, varios funcionarios obligaron a periodistas a eliminar material y les quitaron sus equipos.