La conducción de la Unión Industrial Argentina (UIA) expresó este martes su respaldo "a la filosofía y las líneas principales" de la reforma tributaria y laboral que impulsa el gobierno nacional, aunque reclamó por el impacto que tendrá la mayor presión impositiva sobre los vinos, espumantes, cervezas y bebidas azucaradas.
Así lo plantearon los integrantes de la Junta Directiva de la UIA durante una reunión que los empresarios mantuvieron esta tarde con los ministros de Trabajo, Jorge Triaca; de Hacienda, Nicolás Dujovne, y de Producción, Francisco Cabrera, en la sede de la entidad, en el centro porteño.
Los ministros presentaron los aspectos principales de las reformas tributaria y laboral anunciadas la semana pasada por el presidente Mauricio Macri, diseñadas, según afirmaron, teniendo en cuenta el trabajo previo realizado con los sectores productivos para escuchar sus necesidades, y ayudarlos a ser competitivos y crear más empleo.
Las propuestas de reformas fueron "claramente bien recibidas" afirmó a la prensa el presidente de la UIA, Miguel Acevedo, tras el encuentro en el que estuvieron representadas todas las provincias y los sectores productivos de la entidad, convocados en el salón del primer piso del edificio de la UIA.
En particular, se destacó la posibilidad de recuperar en seis meses el IVA de las inversiones realizadas, la reducción del Impuesto a las Ganancias sobre utilidades no distribuidas y la eliminación del Impuesto a los Débitos y Créditos (pago a cuenta de Ganancias).
Si bien los industriales plantearon sus preocupaciones por el impacto que tendrá una modificación al alza de impuestos internos para las producciones y economías regionales, Acevedo admitió que "los ministros no se comprometieron a revisar los anuncios, simplemente tomaron nota de las observaciones".
"Los reclamos se orientaron a los impuestos a las bebidas y productos regionales como el vino, las bebidas azucaradas y con alcohol, y a lo que se sumó la situación del bioetanol", reseñó Acevedo sobre el anuncio de incrementos de impuestos internos para vinos, espumantes, cervezas y bebidas azucaradas.