A cuatro años de la muerte del fiscal de la UFI-AMIA, Alberto Nisman, la nueva ministra de Seguridad Sabina Frederic puso en duda las pericias que Gendarmería hizo y que colaboraron para que finalmente el juez Julián Ercolini determinara que se había tratado de un homicidio.
Al día de hoy, los únicos implicados en la causa son Diego Lagomarsino, procesado como partícipe necesario del homicidio, y los custodios de Alberto Nisman, acusados de incumplimiento de los deberes de funcionario público y dos de ellos de encubridores, por no cuidar como corresponde al fiscal aquel 18 de enero de 2015.
Dijo Frederic: "Va a haber cambios de mandos en las jefaturas de la Gendarmería. Todos los jefes nos han presentado su pedido de retiro y a todos les dijimos que vamos a conservar esa solicitud hasta tanto tengamos definido el recambio de los jefes".
Además, en declaraciones a Radio 10, adelantó que van a "revisar el peritaje hecho por Gendarmería sobre la muerte de Nisman".
Tras las declaraciones, Pablo Lanusse, el abogado que representa a Sara Garfunkel, madre de Nisman, adelantó que pedirán a la fiscalía que Frederic "se abstenga de intervenir en la pericia" para "evitar así una violación a la Constitución Nacional que impiden al Poder Ejecutivo a entrometerse en la causas penales en trámite".
Desde el equipo de investigación del caso Nisman dijeron a Clarín que "la ministra de Seguridad no es parte del procesos penal" y no comprenden de qué manera "podría revisar una pericia" que fue solicitada por un juez federal. Además, entienden que la decisión de Frederic "muestra una injerencia del Poder Ejecutivo en el Poder Judicial".