Sofía tiene cuatro años y no se pierde ningún partido de la Selección. La niña, que vive en Miami junto a su hermana de 11 años y su mamá Eliana, fue grabada llorando desconsoladamente porque esperaba que su ídolo, Lionel Messi, hiciera más goles en el partido de Argentina contra Paraguay en la Copa América, que resultó en empate.
Su madre, argentina, manifestó a Crónica: "Estuvo mal durante más de una hora. Decidí grabarla porque su sentimiento fue más que sentido. Le nació desde lo profundo de su corazón".
"Tiene la camiseta y le encanta recitar cánticos a favor de la selección. Cuando ve los partidos, lo primero que pregunta es dónde está Messi. Ella cree que todo lo tiene que hacer él y pide que le pasen la pelota al diez. Está como todos los argentinos", dijo su madre.