La gobernadora de Tierra del Fuego, Rosana Bertone, cuestionó hoy al gobierno nacional por "tomar decisiones sobre las Islas Malvinas sin tener en cuenta a la provincia" que contiene en su jurisdicción al archipiélago y, en una nota dirigida al canciller Jorge Faurie, criticó el rumbo de las negociaciones con Gran Bretaña porque, afirmó, "afectan los intereses fueguinos".
La justicialista Bertone aseveró en el escrito enviado al ministro de Relaciones Exteriores que "recurrentemente debemos enterarnos por los medios de comunicación, tanto nacionales como británicos, de las preocupantes medidas (que se adoptan) en aspectos que incumben a asuntos de relevancia para la provincia".
La mandataria hizo referencia a la reunión de esta semana en Buenos Aires del "Subcomité Científico de la Comisión de Pesca del Atlántico Sur", establecida por la Declaración Conjunta del 28 de noviembre de 1990, a la que asistieron científicos y funcionarios nacionales y británicos, incluso algunos isleños, pero no representantes de Tierra del Fuego.
En esa línea, consideró que la asistencia de ciudadanos británicos que habitan las islas constituye "una gran decepción por parte de la Cancillería".
También mencionó que el ámbito de la Comisión de Pesca fue abandonado por Argentina en 2005 "ante las frecuentes decisiones unilaterales que el gobierno del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte adoptó en la zona", criticó la gobernadora.
"Frente a la situación de que como provincia marítima observamos desde hace años la depredación de los recursos pesqueros en el Atlántico sur, no podemos perder de vista este tema inseparablemente unido a los problemas económicos que atraviesa el país", insistió Bertone en la nota que difundió esta tarde el gobierno provincial.
A su vez, estimó que "las pérdidas económicas de Argentina por las actividades de pesca ilegal y de explotación de otros recursos naturales, renovables y no renovables, sustentada en muchos casos por la emisión unilateral e ilegítima de permisos de pesca que realizan autoridades de ocupación británica en el Atlántico Sur, no pueden ser desconocida".
La gobernadora advirtió, además, que "cualquier avance en negociaciones bilaterales, que nuestro país solicita desde hace años para encontrar una solución a la disputa de soberanía, debe realizarse en base a los intereses nacionales, resguardando el patrimonio de todos los argentinos, y preservando también estos espacios para las futuras generaciones".
Incluso, recordó que la voluntad del pueblo argentino en relación a la Causa Malvinas quedó plasmada mediante la incorporación de la disposición transitoria primera de la reforma de la Constitución de 1994 y fue reafirmada por todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria en la Declaración de Ushuaia de 2012.
"Comprendo que la política exterior es una competencia delegada constitucionalmente al gobierno federal pero atento a la jurisdicción provincial consagrada por ley, solicito mayor participación en los asuntos inherentes a las Islas Malvinas", concluyó Bertone.
