Duki es un cantante argentino de 27 años, que a los 20 años saltó a la fama en la escena musical argentina, gracias a su éxito en las batallas de freestyle y más tarde, a su éxito en las canciones y arriba del escenario. Actualmente, es un referente del género urbano en la industria nacional e internacional.
En esta oportunidad, Duki se presentó en el Movistar Arena, peor no para cantar, sino para formar parte de la charla en Endeavor Argentina, una red de apoyo al emprendedor, a la cual asistieron más de 12.000 jóvenes estudiantes, y en la que Julio Leiva entrevistó al trapero.
En primer lugar, Duki aconsejó sobre el estudio y el aprendizaje comparado con su propia experiencia: “Yo veo gente que va a estudiar y dice: ‘uy, fui a estudiar esto y no sé si es lo que quiero hacer toda mi vida’, y no es lo que tenés que hacer toda tu vida. Claramente, no vas a estar toda tu vida igual, en el mismo lugar parado, sintiéndote igual. Habrá momentos en los que, y lo más lindo, es que hay tiempo para aprender, equivocarse, caerse y levantarse”.
“Hay tiempo para hacer algo solo por amor y no por dinero, hay tiempo para encerrarse, para hacer las cosas por dinero, porque el mundo se mueve por dinero. No les voy a mentir, a los 18 años te vas a enfrentar al mundo, vas a ir a trabajar de algo, probablemente no te guste, te vas a pegar 500.000 palazos, y lo más importante, todos tenemos cosas para aprender”, reflexionó.
Duki finalizó su consejo y dijo: “No veamos la vida como algo que va a durar toda la vida. Aprovechemos el tiempo y la capacidad de aprender, de evolucionar y sobre todo, de disfrutar porque yo al principio veía el aprendizaje como algo malo y decía: ‘no tengo ganas de hacer esto, voy a salir de joda, me voy a juntar con amigos’, y cuando empezás a aprender tenés un disfrute propio y te das cuenta de que no eres una persona más, soy alguien sabio con la capacidad de resolver y crear. Lo más lindo es sentirse bien con uno mismo”.
El sueño de Duki y su estadio en el Santiago Bernabéu
El 8 de junio Duki realizará un show en el Estadio Santiago Bernabéu de Madrid y en la charla comentó: “Yo no soñaba con el Bernabéu, ni entraba dentro de mi registro”, y explicó como renueva sus sueños: “A medida que pasas fronteras y superando obstáculos, la vida te pone nuevos. En mi caso es el hambre, todos los días quiero ser mejor que ayer. Cuando termine el Bernabéu, habrá un obstáculo más grande o de igual importancia. Lo que más miedo me da perder es el hambre, hay mil cosas por hacer que no hice. En mi motivación, el Luna Park se tiene que sentir igual que el Bernabéu”.