El Día Mundial del Asma se conmemora el primer martes de mayo de cada año y fue propuesto por GINA (Iniciativa Global para el Asma), un programa creado en 1993, en colaboración con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos y la OMS. Es por eso que en Tandil se trabaja arduamente en la enfermedad para evitar casos de riesgo durante el invierno.
Un estudio realizado en siete instituciones de la ciudad de Buenos Aires y la provincia de Buenos Aires, donde se evaluaron 441 pacientes con asma, puso de manifiesto que el 61 por ciento tenía criterios para ser derivado a un especialista en asma grave, por el número de exacerbaciones severas que presentaban y/o el elevado consumo de broncodilatadores de acción corta (SABA, por sus siglas en inglés) y de corticoides sistémicos.
Adicionalmente, según el análisis de los datos argentinos del estudio SABINA Internacional, a 1 de cada 3 personas con asma se le prescribieron tres o más inhaladores SABA al año (lo que los expone a mayor riesgo de exacerbaciones severas) y un 20% los adquirió sin prescripción médica.
Según la OMS, “la mayor parte de las muertes relacionadas con el asma se producen en países de ingreso bajo y mediano-bajo, en los que la falta de diagnóstico y tratamiento suponen un problema”, por eso el lema elegido por GINA para este año es “Cerrar brechas en la atención del asma”.
“El asma es un proceso inflamatorio crónico de la mucosa de los bronquios que puede ocurrir a cualquier edad y esto es lo que da origen a la sintomatología”, indicó Anahí Yañez, médica especialista en Alergia e Inmunología Clínica. Además sostuvo que “la forma de presentación clínica del asma es diversa y depende de cada persona; hay pacientes que tienen como único síntoma la tos mientras que otros pueden tener sensación de falta de aire, chillido, tos y secreciones”.
¿Cuál es el origen del Asma?
El origen de esta enfermedad crónica tiene causas múltiples: “hay factores ambientales, genéticos, familiares, incluso a veces el hábito de fumar hace que los pacientes desarrollen asma a lo largo de su vida”, sostuvo la Organización Mundial de Salud, la cual estimó que en 2019 el asma afectó a 262 millones de personas y causó 461 mil muertes; en tanto que en Argentina se estima que afecta al 10% de la población.
Además, “el control del asma es importante porque el paciente puede mantener una calidad de vida acorde a la edad cronológica, es decir hacer las actividades que quiera de acuerdo a su edad”. La especialista explicó que “la base de los tratamientos permanentes para controlar el asma son los corticoides inhalados que disminuyen la inflamación y pueden ser asociados a los broncodilatadores de larga duración”.
Sergio Zunino, especialista en Neumonología del Hospital Italiano de Buenos Aires, sostuvo que “lo que estamos planteando es que no está indicado el uso de broncodilatadores como única droga para el tratamiento del asma. Usualmente, cuando hablamos de rescatadores o broncodilatadores nos referimos a los de acción corta, estos son aquellos que tienen un inicio de acción de 3 a 4 minutos y que a las dos horas disminuyen y dejan de hacer efecto. Por eso los pacientes necesitan usarlo reiteradas veces a lo largo del día”, señaló.
En este contexto, diferentes sociedades científicas como la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC), la Sociedad Argentina de Medicina (SAM), la Sociedad Argentina de Emergencias (SAE) y la Asociación Argentina de Medicina Respiratoria (AAMR), con el apoyo del laboratorio AstraZeneca, lanzaron la iniciativa iniciativa Asma Zero, para poder acercar al paciente y su familia información sobre la enfermedad.