El vendaval de críticas que se levantó la semana pasada sobre el Ministerio de Seguridad de Santa Fe derivó finalmente en la desvinculación del asesor que había sido acusado por su relación con la defensa de Luis Paz, el empresario cuyo nombre acaparó los titulares a partir de su arresto por narcotráfico y lavado de activos en la provincia.
El profesional apuntado es Lucas Peirone, quien fue señalado como socio de uno de los letrados que patrocina al ex mánager de boxeo en el marco de la causa que lleva adelante la Justicia federal de la capital. Respecto de su situación, el ministro de Justicia Ricardo Silberstein confirmó que "se le pidió la renuncia para aventar cualquier duda al respecto".
El integrante del Gabinete provincial también desmintió la denuncia inicial que habían recogido dirigentes de Cambiemos respecto del nexo con José Alcácer, el abogado que asesora al rosarino y también formó parte de la cartera de Seguridad en la gestión previa del socialismo bajo las órdenes de Raúl Lamberto. "No era socio, habían compartido algunas causas", manifestó el funcionario sobre la ligazón con Peirone.
Frente a las dudas que incluso derivaron en un pedido de informes por parte del diputado Carlos Del Frade en la Legislatura, Silberstein añadió que dichos profesionales "no estaban en el mismo estudio ni compartían el mismo lugar" de trabajo.
Mientras tanto, Paz lleva una semana tras las rejas y actualmente está alojado en la cárcel de Coronda a la espera de que el juez Francisco Miño defina su situación procesal. Días atrás, otro de sus abogados había admitido que su cliente, quien acusó a la familia Cantero por su rol dentro de la banda "Los Monos", tenía "negocios irregulares", aunque sin relación con la venta de drogas.