Por segunda vez en menos de un mes, los pedidos del Gobierno santafesino al nacional para nuevas excepciones a la cuarentena se cumplieron a medias. Las autoridades provinciales confirmaron que insistirán en la reapertura de bares y restaurantes, uno de los puntos excluidos de la decisión administrativa de la Jefatura de Gabinete este miércoles.
"Estamos reiterando la solicitud y somos optimistas", afirmó el ministro de Gestión Pública, Rubén Michlig. De esta manera adelantó que esperan una "respuesta favorable" para el fin de semana desde Buenos Aires, de modo que los dos principales conglomerados urbanos puedan retomar esa actividad bajo un protocolo sanitario por la pandemia de coronavirus.
En un reportaje con Radio 2, el funcionario precisó que la visita del gobernador Omar Perotti al presidente Alberto Fernández en la víspera allanó el camino para revisar la cuestión de inmediato. Su declaración se suma a los esfuerzos del intendente rosarino Pablo Javkin para atender de inmediato los reclamos de referentes del sector por una postergación que no esperaban.
La Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines de Rosario (Aehgar) fue una de las primeras en batir el parcha por el anuncio nacional. Su presidente Carlos Mellano remarcó que están cerca de completar "tres meses de facturación cero" y además de ser incluidos en el programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), subrayó que el tema más complicado es la deuda que se generó por los alquileres.