Juan José Murúa, el homicida de Brenda Jimena Arias de 19 años de edad se escapó de la única cárcel de máxima seguridad que tiene la provincia de San Luis en un lugar que es un páramo desolado. Purga en cárcel una condena a 38 años de prisión por “Homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego”.
El Gobierno de la Provincia de San Luis en una comunicación escrita confirma que Juan José Murúa se escapó del Complejo Pampa de las Salinas (en La Botija) a las 21:40 de este miércoles.
La penitenciaría de máxima seguridad sanluiseña
La edificación ocupa unas 42 hectáreas que están ubicadas en cercanías del paraje La Botija (Departamento Ayacucho), a unos 210 kilómetros de San Luis capital. Son 13 edificios que albergarán a 236 internos con condenas firmes.
Operativo con drones con cámaras térmicas
Juan José Murúa de 35 años quien estaba alojado en la cárcel Pampa de las Salinas, en La Botija se escapó y las autoridades están trabajando para “recabar toda la información posible a los fines de establecer las causas que propiciaron la fuga y todos los datos necesarios que se requieren para el caso”.
“Se dispuso un operativo en el que se utilizarán los recursos del Servicio Penitenciario, el cuerpo de Canes de la Policía de San Luis, efectivos policiales y drones con cámaras térmicas”, indicaron oficialmente.
El perfil de un femicida
El condenado Murúa fue trasladado a la cárcel de máxima seguridad en 2018 en cumplimiento de una sentencia por el crimen de Brenda Arias que había desaparecido de la pequeña localidad de Villa del Carmen y que sus restos calcinados fueron encontrados 17 dias.
La Cámara del Crimen de la localidad de Concarán sentenció a Murua a cumplir 38 años y dos meses de prisión por “homicidio simple mediante empleo de arma de fuego”. En la sentencia condenatoria la jueza de Cámara Sandra Piguillem sostuvo que “en el transcurso del proceso ha quedado acreditado que el accionar doloso de Juan José Murúa, que tuvo por finalidad terminar con la vida de Brenda, se llevó a cabo en el contexto de violencia de género; es decir en un contexto femicida. La violencia de Murúa se inscribió en su voluntad de establecer una relación con la víctima de conformidad con sus propios deseos, reglas e imposiciones. Se trató de un acto femicida”.