El jueves alrededor de las 16:45 los habitantes de la localidad sanluiseña de Justo Daract se sorprendieron cuando una lluvia tenue desató una tremenda tormenta con piedras del tamaño de limones pequeños e incluso más grandes que un huevo de gallina.
El jefe de Bomberos Voluntarios del Cuartel "Luis Navarro", José Luis Vega, contó que: "Fueron unos diez minutos, luego la tormenta se dirigió hacia el este, salió el sol y el cielo se despejo".
Mauro Baigorria, otro integrante del cuartel describió que las piedras eran del tamaño "más grande que el huevo de una gallina", lo que claramente se ve en las imágenes compartidas.
Vega precisó que la tormenta no dejó daños graves en la ciudad. "Solo tuvimos que ir a la calle Libertad por un transformador que estaba en cortocircuito y había fuego", concluyó el jefe de los bomberos.
Fuente: El Diario de la República.