La Asociación Pircas en la ciudad de San Luis publicó un informe sobre el estado en el que están los árboles y aseguró que la Municipalidad de San Luis no ha hecho nada ante el avanzado deterioro y pide medidas urgentes. La entidad para la preservación y difusión del patrimonio cultural y natural de la ciudad, había advertido el año pasado que el 60% de los paraísos estaba enfermo.
Según publicó El Diario de la República, el informe de la entidad dice que: "Es posible advertir la existencia de numerosos problemas que afectan a las especies arbóreas", debido a la falta de un adecuado plan de asistencia y mantenimiento.
El documento señala extracciones parciales que forman tacones; cazuelas vacías sin reposición de ejemplares; árboles decrépitos, secos y enfermos; poda indiscriminada fuera de estación y sin controles adecuados; levantamiento de veredas por la presión de las raíces y los troncos y ausencia de campañas educativas para la valoración del arbolado público.
"Existe una inacción del Municipio a pesar de que en reiteradas oportunidades presentamos notas, inclusive en noviembre tuvimos una reunión con el intendente, Enrique Ponce, en la que le planteamos todos esos problemas y es, evidentemente, como si hubiéramos hablado con una pared, porque no se tomaron medidas ni tampoco acciones, en total contradicción con la Ordenanza Nº 2.403 que es la que regula el arbolado público", explicó Ricardo Espinosa, integrante de la Comisión de Medio Ambiente de Pircas.
Espinosa también explicó que el problema no es nuevo y que es responsabilidad de la Comuna cumplir con la normativa vigente, que establece que "la plantación, conservación, erradicación y reimplantación del arbolado queda bajo la exclusiva responsabilidad y competencia".
"Se priorizan otras cosas antes que el arbolado público, dejando de lado los importantes servicios ambientales, sociales, estéticos y paisajísticos que brindan los árboles en la ciudad. Es un tema preocupante", afirmó el integrante de Pircas.
En promedio, entre seis y siete de cada diez árboles de la ciudad padecen algunas de las deficiencias denunciadas por la asociación protectora del patrimonio cultural y natural sanluiseño.
A los problemas generales se suma el proceso de extinción que actualmente sufren los paraísos - Melia Azedarach por su nombre técnico -, la mayoría de las especies del casco histórico de la capital y de los barrios de San Luis ya están afectados por un hongo que los va secando hasta su muerte, un proceso que va de los dos a los tres años. Además del impacto visual y ambiental que eso significa, también se suma el peligro para peatones, automovilistas y viviendas en caso de caída.
Como una solución, la ingeniera forestal, Yvonne Scarpati, dijo que se deberían sacar todos los árboles enfermos y reemplazarlos por especies aptas, sobre todo fresnos.