Un fuerte viento Sur azotó este miércoles en la tarde a la provincia de San Juan. Una enorme nube de polvo avanzó sobre la provincia, acompañada de ráfagas que alcanzaron hasta los 98,1 km/h. El fenómeno, que ya había sido alertado por el Servicio Meteorológico Nacional, generó complicaciones: desde cortes de luz (también bajas de tensión) hasta caída de árboles y viviendas dañadas. Ante la situación se suspendieron las clases en los turnos vespertino y nocturno, y hubo un fuerte trabajo en Protección Civil para asistir a los damnificados.
“Las ráfagas en las zonas urbanas no pasaron los 76 kilómetros por hora y en las zonas abiertas llegaron a 85 a 88 km. por hora. Dentro de este panorama, el fenómeno fue dentro de todo benévolo y provocó inconvenientes que fueron controlados, entre ellos incendios que afectaron más que nada a pastizales en los que intervinieron Bomberos”, explicó Francisco Suraci, director de Protección Civil.
Según publicó Diario de Cuyo, en algunas zonas se reportaron caídas de árboles y en siete departamentos (Chimbas, Pocito, Rawson, Santa Lucía, Rivadavia, Angaco y Capital) hubo cortes de energía. Por esta razón la misma noche del miércoles se habían desplegado cuadrillas de Energía San Juan para solucionar los inconvenientes.
“Todo el sistema de 33 kV está operativo sin ninguna línea ni estación transformadora fuera de servicio. Se están haciendo reparaciones en 13,2 kV y baja tensión. Afecto al Valle del Tulum, los departamentos alejados muy poco daño o ninguno”, afirmó Eduardo Tejada, miembro de la gerencia de la empresa.
Por otro lado se reportaron daños leves en algunas viviendas. “Son casas en los que árboles o ramas se cayeron y gracias al trabajo de Bomberos pudieron quitarse. Incluso en nuestra Dirección hemos sufrido la caída de un pino sobre el techo de donde guardamos los vehículos. Pese a ello, las ráfagas no fueron tan violentas como podrían haber sido”, agregó Suraci.
