El triatleta que fue atacado con agua hirviendo en noviembre correrá el Ironman en San Juan

Se trata de Juan Ignacio Castro, quien en una discusión de tránsito fue agredido por una mujer que le arrojó agua hirviendo. Tras una dura recuperación, contó sobre sus sueños y cómo se preparó para esta especial competencia.

Juani Castro fue agredido en noviembre pasado por una mujer que le tiró agua hirviendo mientras entrenaba. Este domingo correrá el Ironman 70.3.
Juani Castro fue agredido en noviembre pasado por una mujer que le tiró agua hirviendo mientras entrenaba. Este domingo correrá el Ironman 70.3. Foto: diario de cuyo

Juan Ignacio Castro es un triatleta sanjuanino de 23 años que fue noticia en noviembre pasado por una mujer que lo agredió tirándole agua hirviendo. Hoy, tas someterse a tres cirugías y dolorosas curaciones que lo tuvieron internado durante un mes en Terapia Intensiva, se encuentra en condiciones de cumplir su sueño y competir en el Ironman 70.3 que se llevará a cabo por primera vez en San Juan.

Su caso llegó a los medios nacionales y finalmente pudo hablar él mismo con la prensa y contar sus sensaciones, a más de 4 meses de aquél incidente que le provocó quemaduras de grado 1 en el torso y de grado 2 en las piernas y genitales. “Ahora que tomé dimensión de todo lo que pasó y después de mucha ayuda psicológica agradezco donde estoy parado. Empecé en este deporte hace 7 años motivado por correr un Ironman algún día y me preparaba para correr cuando pasó lo que pasó. Es una mezcla de sensaciones lo que estoy sintiendo. Voy a cumplir mi sueño, pero creo que lo que pasó me hizo más fuerte”, contó el joven a Diario de Cuyo.

Luego, habló sobre el proceso de recuperación por el que tuvo que atravesar: “La primera curación fue por fuera del quirófano y sin anestesia. Esa fue la más dolorosa apenas llegué al Hospital Marcial Quiroga. ¿Cuál fue la de mayor dolor? Sin dudas que la quemadura del momento, fue un dolor inexplicable. Nunca pensé en sentir algo así. Si me hacían injerto de piel ahí sí que me quedaba sin Ironman, por eso digo que todo lo que pasó lo tomo como una motivación”.

“Cuando me sacaron las vendas tenía la piel muy sensible y no podía estar al sol. La quemadura de la cadera me molestaba un poco y la piel nueva estaba muy tirante, no podía moverme demasiado. Lo primero que hice fue salir a nadar, nadé con un traje. El primer entrenamiento fue muy fuerte, fue como “el primero de todos” por todo lo que había pasado”, contó, y además recordó que en enero corrió un triatlón en La Rioja y después otro en Mendoza.

Sobre la competencia que se viene, en donde competirá con los mejores triatletas del mundo en la categoría de 20-24 años, concluyó: “Llevo dos meses y días entrenando para la carrera, me siento muy bien pero en la carrera se verán un montón de cosas. Obviamente cada uno hace su carrera personal, hay gente que la corre para disfrutarlo y ver qué se siente. Yo voy a buscar la mejor carrera posible”.