El jueves 5 de noviembre fue el día de cierre de listas para las internas dentro del bloquismo. Por un lado, se presentó una lista con Luis Rueda a la cabeza y por el otro, una con Juan Domingo Bravo como líder. Al día siguiente de las presentaciones, Bravo dijo que su candidatura dentro del partido de la estrella dependía de que su candidata a vicepresidenta, Graciela Caselles, llevara adelante un par de acciones, entre ellas renunciar al Frente Todos en la Cámara de Diputados de la Nación y votar en contra de la reforma judicial. A tres días de sus declaraciones, Bravo renunció a la candidatura en la interna bloquista.
A través de una nota enviada a Diario de Cuyo, el hijo del caudillo, dijo: "Quien me secunda (por la diputada nacional Graciela Caselles) no es clara en llevar a cabo lo acordado, hecho que hace imposible tener una propuesta coherente para el afiliado en particular y la ciudadanía en general". La renuncia de Bravo no es la única, sino que se sumaron siete personas que integraban la lista al Comité Central. Ahora será tanto Caselles como Jorge Godoy (candidato a vicepresidente segundo) quienes deberán decidir cómo sigue la interna.
La alianza entre Bravo y Caselles tiene como eje principal el portazo del bloquismo al frente que conforma con el partido justicialista. "Para ser creíbles, quienes proponemos una opción de gobierno tenemos que cumplir con honestidad las propuestas expresadas en el documento público llamado Convocamos a recuperar la esperanza", agregó en la nota Juan Domingo.
El 29 de noviembre están previstas las elecciones en el bloquismo. En caso de que se caiga la lista de Bravo-Caselles, quedará el camino allanado para que Rueda sea el próximo presidente del emblemático partido de la estrella.