Tatiana volvió a casa tras 82 días internada

Su recuperación, sostenida por equipos del Avellaneda y del sistema público, superó los pronósticos iniciales.

Tatiana volvió a casa tras 82 días internada
Profesionales y familiares celebraron una evolución marcada por rehabilitación intensiva y acompañamiento permanente del Servicio Público de Salud.

Después de casi tres meses de internación, Tatiana, una niña de 10 años, dejó hoy el Hospital Avellaneda para comenzar una nueva etapa junto a su familia.

Su ingreso, el 5 de septiembre, marcó el inicio de un proceso que convocó a numerosos servicios del sistema de salud pública y a un equipo humano que trabajó de manera coordinada desde el primer día.

Funcionarios, profesionales y familiares coincidieron en que su evolución fue posible gracias a una combinación de tratamiento oportuno, rehabilitación intensiva y contención constante, en un sistema que contó con el acompañamiento del gobernador Osvaldo Jaldo y del Ministerio de Salud Pública.

“Hoy es un día muy importante de celebración”

En el cierre de la internación, el ministro de Salud Pública, doctor Luis Medina Ruiz, compartió la emoción por la evolución de la niña: “Hoy es un día muy importante de celebración. Tatiana ingresó hace 82 días, estuvo muy grave y pasó seis días en respirador. Gracias al tratamiento oportuno brindado en el Hospital Avellaneda y al trabajo posterior de rehabilitación, hoy se va caminando, contenta y acompañada por su familia para comenzar una nueva etapa. Tatiana siempre nos decía que acá todos la quieren, y es cierto: ese afecto también forma parte de su recuperación“.

En Tucumán contamos con un sistema de salud público potente, con el apoyo permanente del gobernador, que nos permite salvar vidas y dar nuevas oportunidades. A Tatiana la vamos a extrañar en el hospital, y continuará acompañada por el sistema de salud para recuperar plenamente todas sus potencialidades”.

El ministro también valoró públicamente al personal del hospital: “Felicitamos a todos los profesionales de terapia intensiva pediátrica, rehabilitación, salud mental y nutrición. Gracias a cada uno de los servicios involucrados por su capacidad técnica y, también, por su enorme calidad humana”.

Por su parte, la directora del Hospital Avellaneda, Alba Mariana Pieroni, describió la jornada como una mezcla de alegría, alivio y satisfacción profesional. Explicó que Tatiana recuperó capacidades clave gracias a una intervención interdisciplinaria sostenida durante semanas.

“Va con toda la medicación que necesita y con un trabajo que continuará con el equipo multidisciplinario, con controles periódicos y rehabilitación ambulatoria en el hospital”.

Pieroni detalló que participaron áreas de fonoaudiología, kinesiología, terapia ocupacional, neurología, nefrología, salud mental, trabajo social y nutrición, y subrayó que la niña egresó “caminando, hablando y alimentándose con normalidad”. También remarcó que la escuela domiciliaria permitió que Tatiana siguiera conectada con su vida escolar durante la internación.

La médica fisiatra Gisela Núñez aportó la mirada del equipo de rehabilitación: “Tatiana ingresó con un compromiso neurológico severo: no sostenía la cabeza, tenía muy poca conexión con el entorno y presentaba debilidad marcada en las extremidades”.

“Con el trabajo rehabilitador conseguimos que recupere fuerza, equilibrio, coordinación y habilidades comunicativas, y hoy puede conversar, interactuar y avanzar en la reeducación de la marcha. En esta nueva etapa continuará con un plan ambulatorio intensivo que apunta a reforzar su autonomía y favorecer su reinserción social”.

Una familia que acompañó sin soltar la esperanza

Su mamá, Paola, habló entre lágrimas, combinando emoción y agradecimiento: “No me daban esperanza de que vuelva a caminar o hablar. Hoy lo hace y para nosotros es un milagro. Estamos agradecidos a cada persona que rezó por ella, a quienes nos enviaron estampitas, presentes y oraciones. Cada especialista le tomó mucho cariño, todos la saludaban y se involucraron mucho porque también son papás y mamás y les tocó el corazón. Nos ayudaron muchísimo“.

“Ojalá todos enseñen a sus hijos que las burlas y las palabras pueden lastimar, porque a veces no se dan cuenta de cuánto pueden afectar a otro niño”.

Su papá también destacó el apoyo recibido durante los tres meses de internación: “Muchas gracias por el cariño, por estar desde el primer momento con nosotros y por todos los presentes que le trajeron. Eso nos dio mucha fuerza para llevar estos tres meses. Es importante que las familias enseñen empatía y buenas conductas para prevenir el bullying“.

“El hospital tiene recursos que nos sorprendieron, y gracias al sistema público de salud y al acompañamiento recibido nuestra hija logró una recuperación que superó los pronósticos”.