Siguen las repercusiones por la demolición del techo de una casona histórica emplazada en pleno centro salteño. La Municipalidad ordenó la paralización preventiva de las obras, que cuentan con planos de remodelación aprobados, y ahora juntan firman para evitar su intervención. Consideran que la antigua casa tiene un valor histórico fundamental para la provincia.
La polémica se generó el lunes pasado cuando una mujer publicó imágenes de la demolición y contó que la casa había sido donada por la familia Franzini al Opus Dei para convertirla en un espacio de retiro pero que la congregación religiosa la alquiló durante años a un colegio privado. Por su parte, Belén Franzini, se sumó al reclamo y manifestó su disconformidad con las obras.
Por la repercusión del tema, la Municipalidad decidió intervenir y paralizar de manera preventiva el proyecto, que se encuentra con planos aprobados de Proyecto y Remodelación. Otro dato importante es que la casa tampoco se encuentra catalogada como bien patrimonial.
Sin embargo el malestar de la gente sigue vigente, sobre todo por las redes sociales y en los grupos dedicados a revalorizar el pasado salteño, quienes han encabezado una colecta de firmas para que se frene definitivamente la obra. Dicha campaña se realiza mediante la plataforma Change.org, bajo el título “Paren demolición de casa histórica de calle Caseros 1401 de ciudad de Salta, Argentina”, y con un breve resumen de la historia del inmueble, construido en el año 1878, perteneciente a familias como Solá Ovejero, Patrón Costas y Franzini.
“Este mes, en forma sorpresiva y violando la voluntad de quienes donaron la casa, la Asociación Cultural del Norte inició con llamativa prisa la demolición de la casona de calle Caseros. En forma apresurada y en plenas vacaciones iniciaron la demolición de una casa histórica de nuestra ciudad. De este modo no sólo violaron el cargo de la donación sino los fines mismos para los que fue creada la Asociación Cultural al destruir 130 años de cultura”, protestan dentro de la campaña.