El fútbol argentino se vio sacudido en las últimas horas ante la noticia de la muerte de un símbolo del festejo de Diego Maradona en México ‘86, cuando la Argentina consiguió su segundo título mundial.
La noticia del fallecimiento de Roberto Cejas, ocurrida en Santa Fe a los 68 años, entristeció a los hinchas que lo recuerdan por aquel icónico momento en la final del Mundial. Su espontáneo gesto lo convirtió en un personaje entrañable del deporte.
Durante la vuelta olímpica en el Estadio Azteca, tras la consagración argentina, Cejas logró colarse entre la multitud y levantar sobre sus hombros a Diego Maradona, quien sostenía la Copa del Mundo. La imagen quedó para la historia y se transformó en símbolo del fervor y la pasión de los fanáticos argentinos.
Años más tarde, Cejas relató cómo sucedió todo: “Él me iba diciendo por dónde ir”, recordó, admitiendo que apenas podía creer que estaba cargando al astro argentino. Su acción, completamente espontánea, fue capturada por las cámaras y difundida en todo el mundo.
A pesar de su fama momentánea, Cejas llevó una vida tranquila en Santa Fe, trabajando como vendedor de materiales de construcción y disfrutando de su familia. Nunca buscó protagonismo, pero su nombre quedó ligado para siempre a la historia del fútbol argentino.
La familia de Cejas compartió su pesar en redes sociales. Silvia Zabala, esposa de su hermano, expresó: “Vuela alto, cuñado, ya están todos juntos. Descansá en paz, Roberto, y desde allá cuídennos a todos”. Estas palabras reflejan el impacto emocional que su pérdida genera en quienes lo conocieron.
En 2014, tuvo un emotivo reencuentro con Maradona durante el Mundial en Brasil. El propio Diego lo recibió con un cálido comentario: “Sabés cuánto pesa la Copa, pero yo sé cuánto pesa la Copa”, recordando aquel momento inolvidable en México.
Con su partida, el fútbol argentino pierde a uno de sus íconos populares, un hincha que sin ser jugador ni entrenador, se convirtió en parte de la leyenda gracias a su espontaneidad y amor por la camiseta.
Roberto Cejas será recordado por siempre como el hombre que llevó a Maradona hacia la gloria. Su gesto demuestra que, a veces, los protagonistas del fútbol no son solo quienes están dentro de la cancha, sino también quienes, desde las gradas, dejan huella en la historia.
