Si bien estaba casi cantado que el hombre seguiría internado en la Colonia Psiquiátrica de Oliveros, este lunes se realizó la audiencia imputativa en la que se determinó que Antonio Rosario L., el cordobés de 64 años, permanezca recluido en dicha institución.
De hecho el propio acusado no formó parte del acto judicial por recomendación de los médicos que determinaron que el sujeto no estaba en condiciones de comprender la criminalidad de sus actos, ni de declarar.
La decisión de mantener la internación fue definida por el juez Héctor Núñez Cartelle luego de la recomendación hecha por el fiscal José Luis Caterina, que tomó parte en la causa que se abrió el mismo miércoles tras la detención del hombre cuando subió al escenario donde estaban los locutores del acto central por el Día de la Bandera y amenazó con un cuchillo a los allí presentes.
El magistrado indicó la conformación de una junta médica a fin de diagnosticar y determinar la inimputabilidad sostenida en el informe del consultorio forense. Además, se le asignó una custodia policial en su espacio de reclusión en Oliveros por ser considerado peligroso para sí y para terceros.
Lo que sigue siendo un misterio es el cuchillo que utilizó cuando irrumpió sorpresivamente en el palco. El arma blanca desapareció cuando lograron dominar al hombre y desde entonces nada se supo.
Antonio Rosario L, subió a los gritos diciendo: "Yo soy el hijo de Evita" y generó pánico y corridas en el lugar. Oriundo de Villa María, el hombre forcejeó con uno de los encargados de prensa del Municipio antes de ser reducido.