Pericia balística de la Policía de Investigaciones (PDI) concluyó que en tres ataques homicidas que dejaron en total cuatro víctimas fatales se usó una misma arma. El resultado del informe apoya la tesis de que el trasfondo de dichos episodios lleva como marca la rivalidad existente entre la banda "Los Monos" y la que responde a Esteban Lindor Alvarado.
Según publicó este lunes el diario La Capital, los crímenes de Ariel Señuque ocurrido en Pichincha, el de Ezequiel David Ramírez, asesinado en Ibarlucea y las muertas de Gustavo Candia y Tiziana López, atacados en Arijón y Balcarce, fueron concretados por una pistola Glock calibre 45 y por lo tanto se presume que los hechos están vinculados.
El trabajo de la Policía de Investigaciones arrojó también detalles fundamentales sobre la figura de Ezequiel David Ramírez, de 30 años, ejecutado en su habitación por alguien que ni le dio tiempo a levantarse. El hombre tenía un pedido de captura por homicidio. El hecho ocurrió el pasado 25 de julio por desconocidos que entraron a la fuerza a la vivienda al grito de "policía".
Según los avances que logró el Ministerio Público de la Acusación (MPA), Ramírez era hijo de un agente de policía y tenía vinculaciones con la venta de estupefacientes en la zona noroeste. Dicho efectivo policial, además, es medio hermano de Esteban Alvarado. El entramado incluyó el hallazgo, en el domicilio del crimen documentación en blanco perteneciente a la Policía de INvestigaciones (PDI).
La información conocida en las últimas horas sobre el empleo de una misma arma en los tres ataques y los detalles que emparentan el acciones de Ramírez con la figura de Alvarado no hacen más que relacionar los hechos que hoy desvelan a la fiscalía.
