Lucha contra el cáncer: "Se puede, se sana y se sale"

"Superar el cáncer
                                 Pequeños pasos
                                                               TODOS LOS DÍAS"

Es la leyenda junto a la campana del Hospital Municipal "Eva Perón", esa campana que sonó de la mano Graciela Cicconi esta semana.

El video que publicó Via Punta Alta superó las 10 mil reproducciones y tuvo centenares de compartidos y comentarios. La historia de Graciela se transformó en un ejemplo de lucha y conmovió a los lectores.

Fue ella quien accedió al pedido de la Redacción para compartir su vivencia y poner su voz para compartir su lucha.

"Soy Graciela Cicconi les cuento fui diagnosticada con cáncer de mama en octubre del año pasado. El 20 de noviembre la doctora Gabriela Godoy me hizo una mastectomía con vaciamiento axilar, tenia un carcinoma invasivo. Tuve un "periodo de vacaciones" hasta que me vio el doctor Alejandro Ferro", contó.

Quimioterapia es una palabra que causa miedo, para quien debe atravesarla y para sus seres queridos. "El 8 de enero comenzamos con la quimioterapia hice 16 sesiones, fue fundamental el apoyo de mis hijas, familia y amigos", cuenta Graciela.

"No me sentí enferma hasta el dia que se me empezó a caer el pelo. Fue un dia critico ese. Lloré me enojé, pero la enfermedad estaba en el cuerpo y la sanación en mi cabeza".

Esa actitud y perder el miedo a la palabra cáncer fueron claves. "Desde el dia 1 de mi diagnóstico todos los lunes hice sesiones de reiki con Elizabeth Italiano y eso me llevo a tener siempre mis análisis normales y a enfrentar las quimio de la mejor manera. No fue fácil pero puse lo mejor de mi creyendo que sanaba. Estaba convencida que estaba sanando, y así fue. Estoy sana, me siento de esa manera", comparte Graciela con enorme entereza.

Cuando fue convocada por Vía para compartir su experiencia, Graciela no puso reparos, solo pidió unas horas para sentirse bien y grabar el video. "Si sirve para que que puedo ayudar a alguien, bienvenido", dijo por whatsapp.

"Mi mensaje es que se hagan los controles, que vayan a buenos médicos. El doctor Ferro fue clave, si él no estaba yo no me hacia el tratamiento, me sentía contenida. Es un señor, es un mago en la contención, en el amor para pasar esas horas de tratamiento, que es parte del sanar y de eso se trata".

La lucha por vivir continúa, ahora vendrá para Graciela una nueva etapa del tratamiento. "Estoy en un periodo de espera para iniciar el tratamiento de radioterapia. Serán 25 sesiones, poniéndole la mejor onda, sabiendo que salgo adelante. Hay que creer y aferrarse a algo con mucha fe. Creérsela porque se puede, se sana y se sale".

​Esas campanas sonaron para darle fin a una parte del tratamiento que a veces es bastante invasivo", finalizó.