Agenda sensible y un método quirúrgico: la estrategia opositora que le propinó al oficialismo 12 golpes al hilo

Con el resultado de la sesión en Diputados, la oposición quedó en condiciones de juntar los dos tercios para resistir los futuros vetos sobre universidades y Garrahan. Cinco decretos quedaron a tiro de ser anulados. “Perdimos todas”, admitió Francos.

Agenda sensible y un método quirúrgico: la estrategia opositora que le propinó al oficialismo 12 golpes al hilo
"Megasesión" en Diputados de este miércoles 6 de agosto. (Gentileza Clarín)

El gobierno de Javier Milei enfrenta su peor momento en el Congreso. Sin gestiones para desactivar las bombas ni cantidad suficiente de diputados para resistir, La Libertad Avanza sufrió en la sesión de este miércoles 12 derrotas al hilo y se le dificultará sostener los futuros vetos a las leyes de presupuesto universitario y del Garrahan. “Perdimos todas”, admitió el jefe de Gabinete, Guillermo Francos.

No sin dificultades, la oposición jugó con inteligencia para lograr el objetivo. Los armadores de Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre y la Coalición Cívica diseñaron un temario que los contuvo a todos y ordenaron los temas de manera quirúrgica para mantener el interés y el quórum hasta el final. Al mismo tiempo, tocaron fibras sensibles en la UCR de Rodrigo De Loredo, que aportó votos en los dos principales temas.

De esta manera, el presupuesto universitario quedó a solo un voto afirmativo de los dos tercios, cifra que se necesita para voltear un veto. Y la emergencia en el hospital Garrahan directamente alcanzó esa mayoría. Son los primeros dos datos que deberían inquietar a Milei, quien prometió vetar cualquier ley que dañe el equilibrio fiscal.

La tercera gran preocupación para la Casa Rosada tiene que ver con el futuro de cinco decretos desreguladores. Son los decretos delegados de eliminación de la Dirección Nacional de Vialidad (461/25); transformación del INTA y el INTI (462/25), del Banco de Datos Genéticos (351/25) y de organismos culturales (345/25); y el DNU 340/25, que estableció un nuevo régimen de la Marina Mercante y limitó el derecho a huelga.

Todos esos decretos se dictaron gracias a las facultades delegadas al Ejecutivo en la Ley Bases. Esa norma había sido rechazada por Unión por la Patria y acompañada por otros bloques de la entonces oposición dialoguista, como Encuentro Federal, la Coalición Cívica y el radicalismo crítico. Pero los tiempos cambiaron y ahora la oposición dura y de “centro” encuentran más afinidades.

“Cuando tratamos la Ley Bases, nos sentamos y la acompañamos. Sabíamos lo que estábamos discutiendo; no podemos mirar para otro lado. Hoy no podemos decir que no sabíamos lo que votábamos”, se ofuscó Cristian Ritondo, jefe del bloque PRO, quien ya se calzó un buzo violeta en la primera actividad de campaña de la alianza en el partido bonaerense de La Matanza, encabezada por el propio Milei.

Otro dolor de cabeza para los libertarios es que la oposición activó los proyectos de gobernadores sobre el reparto de ATN (Aportes del Tesoro Nacional) y de impuesto a los Combustibles. Se tratarán el próximo miércoles 13 en sendas reuniones de comisión y se firmará dictamen para habilitar el tratamiento en el recinto, posiblemente el 20. Francos anticipó este jueves que también podrían vetar esas leyes.

Intento fallido

Entrada la noche, La Libertad Avanza intentó acarrear a bloques aliados y hacer caer la sesión. En el bloque libertario que conduce Gabriel Bornoroni habían estado haciendo números y especulaban con que, una vez aprobado el emplazamiento para el segundo proyecto de los gobernadores, el quórum se desgajara y no se pudiera completar el temario.

Advertidos sobre la jugada, los armadores de la sesión (entre los que volvió a tener preponderancia el cordobés Oscar Agost Carreño, de Encuentro Federal), trabajaron para evitar bajas y mantener los 129 presentes. El líder de Unión por la Patria, Germán Martínez, también hizo lo suyo y pidió desde su banca que ningún diputado se levantara.

“A los que quieren continuar con la sesión, les pido que no pisemos ningún palito de ninguna negociación extraña y nos quedemos hasta el final, como corresponde, garantizando el quórum necesario para que los decretos delegados puedan efectivamente tratarse”, exigió.

El decreto que disolvió Vialidad Nacional fue colocado estratégicamente al final del temario, para que todos los diputados que manifestaron preocupación por el impacto en las provincias garantizaran presencias. Ese decreto y el del INTA y el INTI fueron los que más rechazos cosecharon en la oposición: 138 y 141 votos, respectivamente.

Gracias a ese esquema de sesión, antes pudo aprobarse un emplazamiento para romper el bloqueo de la comisión investigadora $LIBRA, un tema que siempre hace estallar el recinto. El próximo martes tendrán que dictaminar un proyecto de Maximiliano Ferraro (Coalición Cívica) para terminar con el empate y que la oposición pueda colocar un presidente, que además tenga el poder de desempatar.

También se aprobó otro emplazamiento a comisiones impulsado por el kirchnerismo para avanzar con la declaración de otra emergencia, en este caso en el sistema de ciencia y técnica (el sector denuncia un fuerte desfinanciamiento del Gobierno). Y el neurocientífico Facundo Manes, de Democracia para Siempre, se dio el lujo de activar un proyecto suyo sobre Alzheimer. Así, cada bloque se llevó un logro bajo el brazo.

La reacción oficial

El oficialismo intenta instalar un discurso donde engloba a toda la oposición en el kirchnerismo. “Estamos en una etapa preelectoral donde el kirchnerismo se aprovechó de la situación para obtener el apoyo de otros legisladores del radicalismo, la Coalición Cívica, etcétera, y hacer un poco de demagogia”, lamentó Francos este jueves en declaraciones a radio Mitre.

“El kirchnerismo quiere romper al Gobierno y todo lo que hemos avanzado hasta aquí. Tienen miedo de perder todas las prebendas que obtuvieron en este siglo. Este siglo fue dominado por el kirchnerismo y el país fue destruido”, agregó el funcionario.

En el mismo sentido, el presidente de la Cámara Baja, Martín Menem, publicó en redes sociales: “Ponerse de acuerdo con el kirchnerismo y votar leyes para perjudicar a un gobierno que está obteniendo resultados, es básicamente odiar a la Argentina. Priorizan sus intereses personales y sus lugares en las listas por encima de todo. Falta menos para octubre”.

En el recinto, Ritondo (PRO) se había pronunciado en la misma línea: “La época de campaña es corta, pero la vida institucional de la Argentina es larga. Muchas veces los caminos del medio parecen ser más una autopista colectora del kirchnerismo que una propuesta en serio”.