La masacre de Villa Crespo, en la que Laura Leguizamón asesinó a su esposo y a sus dos hijos antes de suicidarse, sigue generando conmoción y preguntas sin respuestas claras. En las últimas horas, la investigación se centra en el estado de salud mental de la mujer y en la figura del psiquiatra que la atendía, quien habría sugerido una internación previa a la tragedia.
Según confirmaron fuentes del caso a Noticias Argentinas, se están analizando los historiales clínicos y la medicación encontrada en la escena del crimen. Entre los fármacos secuestrados se hallaron sertralina Rospaw 50 mg, un antidepresivo comúnmente recetado para trastornos de ansiedad y depresión, y olanzapina Midax 10 mg, un antipsicótico utilizado en casos de esquizofrenia y trastorno bipolar. Ambos medicamentos indican que Leguizamón atravesaba un tratamiento psiquiátrico activo por un cuadro severo.
¿Un brote psicótico con advertencias previas?
Fuentes cercanas al entorno familiar y a la causa revelaron que Laura había comenzado un tratamiento psicológico y psiquiátrico al menos dos meses antes del crimen, a raíz de un cuadro de depresión y posibles síntomas de esquizofrenia.
Nora Leguizamón, hermana de la mujer, confirmó que su salud mental se había deteriorado notablemente. Sin embargo, según Los Andes ahora se investiga si hubo una advertencia concreta del psiquiatra para internarla y si esa sugerencia fue rechazada por la familia. Este dato podría resultar clave para determinar eventuales responsabilidades profesionales o legales.
El peso de la salud mental en tragedias familiares
El caso reabre el debate sobre la salud mental en Argentina, los procesos de internación involuntaria, y el acompañamiento familiar en casos de trastornos psiquiátricos severos. Mientras tanto, los peritos forenses analizan la carta escrita con sangre, los cuchillos secuestrados, los dispositivos electrónicos y la historia clínica completa de Leguizamón para reconstruir las horas previas al brutal hecho.
¿Qué se sabe hasta ahora?
- Laura Leguizamón mató a su esposo y dos hijos antes de quitarse la vida.
- Estaba bajo tratamiento psiquiátrico con medicamentos para depresión y esquizofrenia.
- El psiquiatra habría recomendado su internación, pero se investiga si fue rechazada por la familia.
- El Ministerio Público Fiscal espera los resultados preliminares de las pericias para avanzar en las responsabilidades del caso.
La sociedad argentina mira con dolor e incertidumbre esta tragedia, que no solo enluta a una familia, sino que también pone en foco el abordaje de la salud mental y los mecanismos de prevención ante situaciones de riesgo extremo.
