Personal de la Policía de Mendoza negociaron con una mujer de nacionalidad mexicana, que amenazó con suicidarse. El hecho sucedió en la madrugada del domingo en su casa de Guaymallén. Por suerte, tras casi dos horas de intenso diálogo se logró evitar que la extranjera se quitara la vida.
Según el informe policial, una mujer de nacionalidad mexicana y oriunda de Estados Unidos, que estaba atravesando por una crisis depresiva causada por problemas de pareja y de desarraigo, quiso causar su muerte.
El hecho comenzó mediante un llamado de un hombre al 911 para pedir auxilio porque su cónyugue se había encerrado en una de las habitaciones de la vivienda, de calle Víctor Hugo y Mariano Moreno de Guaymallén. Y dijo que la mujer tenía intensiones de lastimarse con un vidrio de un frasco roto. Acto seguido hubo un gran despliegue policial (de las Fuerzas Operativas Especiales) para evitar que la extranjera, que se encontraba junto a su hija de 17 años, atentara contra su vida.
Policías de la Unidad Especial de Patrullaje Guaymallén (UEP) y de la Unidad de Acción Preventiva (UAP) arribaron al domicilio y luego de constatar lo que sucedía decidieron activar el protocolo de actuación para situaciones de crisis. De allí que efectivos del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS) y del Grupo Especial de Segurida (GES) tomaron el control del caso.
Un negociador, con ayuda de personal de la Unidad Policial de Asistencia al Turista, pudo entablar una conversación (la mujer hablaba en inglés) y la convenció de desistir de sus intenciones causada por la crisis que padecía por no poder volver a Estados Unidos, sumado a la inminente separación de su pareja.
Luego de casi dos horas, la mujer accedió a ser atendida por una médica del Servicio de Emergencias Coordinado (SEC). Y posteriormente, fue trasladada con custodia policial hasta el Hospital El Sauce.
