Este fin de semana los prestadores del sistema de salud de la provincia realizarán un paro total de actividades por 48 horas. La medida de fuerza será el próximo viernes 7 y sábado 8 de febrero con el objetivo de reclamar las condiciones laborales en las que se encuentran 2.000 trabajadores.
Se trata de monotributistas que están relación de dependencia con el estado, por lo que están en una situación precarizada, indicaron desde la Asociación de Profesionales de la Salud (Ampros).
"Estas modalidades no otorgan ningún derecho al trabajador ni estabilidad en la atención al paciente, con el riesgo que implica que estos profesionales hoy estén y mañana no, ya que no existe ninguna relación formal con el Gobierno. Sumado a ello, el Ejecutivo favorece la tercerización de los servicios, lo que implica la privatización encubierta de las especialidades más escasas como Terapia Intensiva, Pediatría, Neurología, Oftalmología, Traumatología, Neonatología, Cardiología, Psiquiatría y otras", expresó a Sitio Andino María Isabel Del Pópolo, secretaria general de Ampros.
Por su parte, Claudia Iturbe, secretaria adjunta de la entidad gremial, destacó que "la situación ya no puede dilatarse más. Se trata de profesionales que no reciben aportes jubilatorios, ART, obra social, ni antigüedad. No pueden acceder a ascensos en su carrera, no tienen vacaciones ni perciben aumentos equivalentes al resto de la población sanitaria, no gozan de descansos, licencias por enfermedad ni protección por maternidad".
"Esto se viene haciendo desde los 90 y nosotros cada 3 años los pasamos a planta con la paritarias. Pero desde hace 5 años no se efectiviza la esta medida", reclamó.