Un joven proveniente del Litoral se pondrá hoy a disposición del Tribunal Colegiado N°2, en el juicio por los abusos sexuales y episodios de corrupción de menores registrados en el instituto religioso Próvolo.
La víctima denunció haber sido atado y vejado en "manada" por los imputados Nicola Corradi (83), Horacio Corbacho (61) Armando Gómez (51) y J.O. (41). En la jornada de hoy, el joven ampliará su denuncia y responderá alguna consulta después de que se reproduzca su Cámara Gesell.
La víctima, que actualmente tiene 26 años y es hipoacúsica, fue protagonista de una de las entrevistas más estremecedoras que tuvo el equipo de psicólogos y de intérpretes de lenguaje de señas al relatar que, cuando era menor, fue sometido sexualmente por varias personas en una oportunidad y que pudo salir del Próvolo, donde quedó internado a los 8 años, "cuando le hizo entender a su familia que en ese lugar le hacían daño".
El muchacho provenía de un hogar de muchas carencias y pocas veces recibía la visita de sus familiares mientras estaba de pupilo en el colegio religioso de Carrodilla.
Su historia, que "raya la tortura y la violencia más extrema" –en palabras de su abogado, Oscar Barrera– cerró un capítulo en el 2010 cuando regresó a su provincia.