La línea 600 de Mendoza quedó reestablecida a media mañana de este viernes luego de que los choferes levantaran la medida de fuerza que llevaban a cabo desde primera hora luego de que un chofer fuera apuñalado. Los conductores se solidarizaron con el agredido y decidieron no subir a las unidades hasta que haya más seguridad. Habían pedido que circulara con ellos un policía por unidad, sin embargo llegaron a otro acuerdo.
Desde el Ministerio de Seguridad sólo aseguraron la presencia de 30 efectivos, al menos en horas de la mañana. De modo que los colectivos que circulen por barrios conflictivos irán con policías en su interior y el resto lo hará sin la presencia policial.
Sin embargo, los choferes no quedaron conformes con la medida y dicen que les resulta muy difícil salir a trabajar con miedo e inseguridad. "Las unidades no poseen cámaras y las que están, en su mayoría, no funcionan. Ya es insostenible salir a trabajar en estas condiciones", expresaron.
La madrugada de este viernes un conductor de la línea 600 fue apuñalado mientras prestaba servicio en Las Heras. Fue cerca de las 5 cuando un individuo se subió al colectivo que circulaba por calle Olascoaga, frente al barrio Colombia y sin mediar palabra lo apuñaló por la espalda.
El agresor se dio a la fuga y la víctima fue trasladada a un hospital para ser atendido.
