Un total de 320 personas habían sido designadas en la planta de personal permanente de la Municipalidad de Palpalá por la gestión anterior poco tiempo antes de finalizar su mandato y ante la presunción de que podría haber algún tipo de irregularidades, el nuevo intendente, Rubén Eduardo Rivarola, dispuso derogar el decreto N° 764 que ordenaba esas incorporaciones, y someter a revisión cada uno de los casos, con el compromiso de que "los empleados que reúnen los requisitos van a volver a planta".
Así es como se determinó que en dicho instrumento estaban comprendidos "treinta funcionarios, 21 personas que pasaron por fallecimiento, 117 por ordenanza de jubilación, siete que tienen más de cinco años de antigüedad, 98 con cuatro años de antigüedad, 16 con menos de tres años y trece con menos de dos años", según detalló el director de Personal del municipio, Ezequiel Ortiz.
A su vez, el procurador municipal Pablo Hernández señaló que dicho decreto "fue dictado con posterioridad a las elecciones" del mes de junio y en una primera aproximación se observó "una serie de omisiones, entre ellas la aprobación del Concejo Deliberante", como también que en el listado "hay gente que cumplía tareas como funcionarios", razones por las que "se inició un análisis caso por caso".
En ese sentido Rivarola anticipó que "los treinta (ex) funcionarios obviamente no van a pasar a planta", pero en cambio "tenemos 117 personas que si están en condiciones" de ser efectivizados.
"Hay muchos legajos incompletos, otros que no están. Lo que queremos es que la vía administrativa sea correcta; todas las personas que reúnan los requisitos van a volver a planta una vez que cumplimenten toda la documentación requerida", agregó el Intendente, para luego puntualizar que "de las 320 personas que figuran en el anexo, aproximadamente 150 están en condiciones de pasar a planta".
Dijo también que "las personas con contrato, lo van a mantener siempre y cuando estén trabajando", por cuanto "lo que queremos es que la gente trabaje como corresponde, más allá de que tenga un contrato de uno o dos años", acotando que "en estos casos se verificará si es gente que realmente tiene necesidad".
Finalmente garantizó que "las 320 personas cobrarán el sueldo correspondiente en enero, y a partir de febrero, a la que le corresponde (ser incorporada a) la planta, se le abonará lo que corresponde. Los demás agentes deberán cumplimentar los requisitos, como los demás empleados", concluyó Rivarola.