Las matanzas, masacres y conflictos en general continúan perpetuándose en territorio ucraniano, y en esta oportunidad, diversas denuncias propias de víctimas de violación han salido a la luz.
En ese sentido, gran cantidad de solados rusos se ven implicados según las manifestaciones de sus víctimas. Lo cierto es que también, muchas de ellas, se ven coartadas a la hora de dar sus testimonios y contar sus verdades.
Denuncias de violaciones sexuales en Ucrania
Esta situación de las denuncias de violaciones sexuales por lo general surgen desde diferentes ámbitos que no son solamente los propios de las víctimas, sino que aparecen desde menciones realizadas por políticos, ciudadanos anónimos e incluso de asociaciones.
Pero esto no data de los últimos días, sino que a mediados de abril el propio presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski ya había hecho pública esta situación de “centenares de casos de violación” e incluso llegó a resaltar que algunos de ellos fueron realizados contra “chicas menores y niños pequeños”.
Este lunes pasado, además, citando uno de los ejemplos, se anunció el proceso contra un soldado ruso, acusado de asesinar a un hombre y haber violado a su esposa, junto a otros militares del Kremlin.
Como este caso, otros tantos más se dan a conocer, pero la dificultad estriba en que la mayoría de las víctimas solicitan permanecer en el anonimato, por lo que la substancialidad de las acusaciones, en parte, termina perdiéndose.
Los testimonios del horror
“Un médico me dijo que, durante meses, la ambulancia solo transportaba a mujeres con ese problema”, fueron las palabras de Volodimir Strilets, un plomero de 45 años, que reside en las inmediaciones de Bucha, a la agencia de noticias AFP. Este hombre, con la palabra “problema”, se refería a las violaciones contra las mujeres.
Aunque, desde otras perspectiva de esta problemática, diversas personas consideran que resulta mejor no tratar el tema “para que esas mujeres puedan retomar sus vidas”.
Cabe resaltar que uno de los puntos a tener presente es que en Ucrania todavía existe un estereotipo acusador contra las mujeres víctimas de violaciones, donde en algunos casos se da “la sospecha de que las víctimas quizá hayan provocado a su agresor”. Por ese motivo, es que muchas de ellas se dan al silencio.