La NASA estrelló, por primera vez en la historia, una nave contra un asteroide para desviar la trayectoria del mismo. Se trató de una misión que forma parte de una prueba de la “defensa planetaria” en caso de que haya una eventual posible colisión contra un objeto cósmico.
La nave que enviaron a estrellarse era más pequeña que un automóvil y tuvo el impacto a más de 20.000 km/h contra el asteroide Dimorphos. Lo alcanzó a las las 23H14 GMT (20.14 hora argentina), informó la agencia AFP, y los equipos de la NASA, reunidos en el centro de control de la misión en Maryland, estallaron de felicidad ante las imágenes espectaculares del asteroide acercándose hasta poco antes del impacto.
La agencia del gobierno estadounidense explicó en un comunicado que “como parte de la estrategia general de defensa planetaria de la NASA, el impacto de DART con el asteroide Dimorphos demuestra una técnica de mitigación viable para proteger el planeta de un asteroide o cometa que se dirija a la Tierra, si se descubre uno”, reportó la agencia DPA.
En la transmisión en vivo se pudieron distinguir claramente las rocas en la superficie gris del asteroide situado a unos 11 millones de kilómetros de la Tierra. “Nos embarcamos en una nueva era, en la que tenemos potencialmente la capacidad de protegernos de un impacto de asteroide peligroso”, declaró Lori Glaze, directora de ciencias planetarias de la NASA.
Dimorphos mide unos 160 metros de diámetro y no representa ningún peligro para nuestro planeta. Es en realidad el satélite de otro asteroide más grande, Didymos, alrededor del cual giraba en órbita en 11 horas y 55 minutos. La NASA buscaba reducir su órbita en unos 10 minutos para acercarlo a Didymos.
Aunque el objetivo sigue siendo modesto en comparación con el de películas de ciencia ficción como “Armageddon”, esta misión de “defensa planetaria” bautizada como DART (dardo) permite a la NASA entrenarse en caso de que un gran asteroide amenace un día con impactar la Tierra.