El día de ayer cerca de las 18 horas en el Skatepark del Barrio San Francisco, dos policías bajaron de sus motos para decirles a quienes estaban haciendo este deporte que debían retirarse porque había finalizado el horario para deportes.
Un poco por el hartazgo de controles irracionales y otro poco por restricciones que dependen del ánimo del uniformado, uno de los chicos, Nicolás López, le recriminó a uno de ellos que no traía el barbijo puesto.
Sin mediar razón alguna, el funcionario policíal, procedió a sacar las esposas y colocarselas al joven para después llevarlo como a un criminal frente a los amigos.
Uno de ellos intentó mediar con la policía para preguntarles porque lo llevaban detenido y la respuesta que recibió es ¿Querés acompañarlo a Comisaría? ante lo cual por supuesto la impotencia y el miedo a terminar preso hizo que solo se dispusiera a ver como llevaban a Nicolás como si fuera un delincuente.
Estos claros abusos de poder por parte de la policía de Formosa ocurren todos los días y solo algunos llegan a denunciarse en las redes. El video logrado de lo ocurrido es claro y la otra circunstancia es que ante la grabación de los sucedido con celulares, los policías evitaron sacarse el casco para ser reconocidos.
Con restricciones a las libertades en general respetadas por los ciudadanos de la capital formoseña ante un escenario de cuarentena, las actitudes intimidantes que generan temor ante un potencial abuso de poder por parte de funcionarios policiales, cada vez son menos toleradas por la sociedad.
Sin embargo las ONG de derechos humanos guardan silencio respecto de estos hechos recurrentes que constituyen violencia institucional y el gobierno lejos de corregirlos, los avala en la conferencia de prensa que realizan todos los días.