El juez federal Ariel Lijo se declaró incompetente de manera parcial para investigar al gobernador Gildo Insfrán, a la ex ministra de Economía Inés Lotto de Vecchietti, a Jorge Ubaldo Melchor (ex titular del Fonfipro formoseño) y a Martín Cortés (presidente del Banco de Formosa) y serán juzgados por la Justicia Provincial.
Ese tramo de la investigación pasará a manos del juzgado de Instrucción y Correccional N° 4 de la Primera Circunscripción Judicial de Formosa, que ya tiene una causa abierta en 2012 por los mismos hechos.
En caso de que la Oficina Anticorrupción no apele la medida, algo que se estima finalmente pasará, ya que su titular Félix Crous no apeló en la causa Los Sauces y Hotesur como tampoco lo haría en cualquier causa que implique complicaciones para "compañeros", la causa The Old Fund finalmente quedará en el fuero provincial y pasará a manos del juzgado de Instrucción y Correccional N° 4 de la Primera Circunscripción Judicial de Formosa, a cargo de Marcelo López Picabea.
No pasará mucho tiempo hasta que el gobernador, Gildo Insfrán, quede absuelto de culpa y cargo y la causa sea archivada de apuro por segunda vez. Nada es casual y que el juez Picabea sera quien tramite el archivo del expediente que tantos dolores de cabeza le dio al gobierno, por tantos antecedentes del magistrado respecto de la obediencia al gobierno de la provincia.
Es bueno aclarar, que cualquier juez provincial que intente enjuiciar a cualquier funcionario de mediano rango en la provincia, mucho menos al gobernador, tendrá un juicio político express antes que cante un gallo promovido obviamente por la Legislatura Provincial.
La última gran aparición del Juez, Marcelo López Picabaea, ocurrió cuando debió intervenir en un hábeas corpus presentado en uno de los centros de cuarentena del gobierno en el contexto de la pandemia.
El habeas corpus presentado en el Superior Tribunal de Justicia de la provincia por el Dr. Javier Barrios fue enviado al juez de instrucción y correccional de turno, Enrique Guillen, quien luego sacó una licencia por razones de salud por lo que la causa pasó al nuevo juez de instrucción y correccional de turno, Marcelo López Picabea.
Si bien el juez Guillen había ordenado una larga serie de medidas que se debían realizarse en el lapso de 48 horas. Estas no se llevaron a cabo, salvo un par que fueron suficientes para el nuevo instructor que "cortó y pego" argumentos del juez provincial, Raúl López Uriburu en otra causa por una medida autosatisfactiva.
Picabea rechazó el habeas corpus convalidó el alojamiento preventivo y transitorio de personas en la Escuela de Cadetes de la Policía tras considerar que quienes permanecen en esas instalaciones no padecen agravamiento alguno en sus condiciones de aislamiento.
El magistrado provincial "liquidó" el pleito en menos de 48 horas pero no asistió al lugar a verificar las instalaciones, no habló con los involucrados ni tampoco participó al abogado patrocinante de las medidas tomadas.