Muchas veces los granos aparecen cuando menos te lo esperas o antes de un evento importante en la vida de las personas. Esos dolores de cabeza que traen son un motivo de tristeza o enojo ante la molestia que generan. Por eso, el método ideal para decirle chau al acné y ahorrarte problemas.
El método ideal para decirle chau a los granos
Es importante saber que hay diferentes tipos de granos y que todos necesitan un tratamiento diferente. Suelen aparecer en la adolescencia, pero también en personas adultas. Eso sí, el motivo siempre es la consecuencia de un aumento en la producción de sebo, en cualquier edad.
El sebo es una sustancia oleosa que forma la piel de manera natural para protegerse del frío o la luz solar. Otros factores que pueden agravar el acné son: estrés, mala alimentación, toma de medicamentos, contaminación, tabaquismo o el ciclo hormonal.
Para evitar los granos, es fundamental tener un cuidado de la piel con un hábito de limpieza todas las mañanas y todas las noches. Existen diferentes tipos de granos y para cada uno hay una solución adecuada:
- Granos rojos: Son la consecuencia de la infección en los puntos negros y lo ideal es usar productos especiales para estos. Algunos suelen ser dolorosos y existen geles para calmar su molestia.
- Granos blancos: Estos aparecen cuando se inflan los rojos con el fin de combatir los microbios, Son visibles y generan pus. Lo que nunca hay que hacer es explotarlos porque pueden quedar marcas en la piel y una agravación. Lo que hay que hacer es tratarlos a diarios con productos de lavado adaptados.
Qué son los puntos negros
Estos aparecen porque los poros se bloquean debido a la acumulación de bacterias y células muertas. Es la primera manifestación del acné y son negros porque el sebo se oxida y se ennegrece al estar en contacto con el aire.
La solución para evitar su aparición, es acompañar la limpieza cotidiana con productos exfoliantes, de 1 a 2 veces por semanas.
