Todo comenzó en Monte Hermoso cuando Lara, una nena de ocho años, fue picada por un extraño insecto y su padre la llevó al Hospital Municipal Carrillo para que sea atendida. Sin embargo, se llevaron una sorpresa cuando vieron lo que le recetó el médico: ravioles con helado.
Una comida y un postre eran las indicaciones en la receta médica. Sorprendido, el papá de la pequeña compartió la imagen en su cuenta de Facebook, la cual no tardó en viralizarse. “Nos atendió un médico de guardia, imagino que sobrepasado por el trabajo en plena pandemia”, comenzó diciendo.
“El tipo con mucha paciencia y simpatía nos tranquilizó. Atendió a Lara con mucho amor, le dio corticoides en gotitas (”para no pincharla”) y nos recomendó que esperemos una hora para volver a revisarla. Gracias al cielo, todo fue bien”, agregó.
Según lo que explicó, la visita a la guardia fue porque creyeron que se trataba de la picadura de una araña, ya que no habían visto al insecto porque ante la desesperación salieron corriendo desde Sauce Grande, lugar del que estaban disfrutando.
Sin embargo, la historia siguió porque al pasar una hora y media Lara debía ser revisada nuevamente. “El Hospital ajetreado y los médicos y enfermeros poniéndole toda la garra, siempre con la mejor onda. Luego de una hora y piquito, volvieron a revisar a Lara y ese médico grandote, de pelo largo y tatuado, un maorí bonaerense, le dio el alta no sin antes recetarle -¡en papel!- ravioles y helado de chocolate”, indicó.
Y para darle cierre al posteo, agradeció al personal de salud por la atención que tuvo su hija. “No tengo palabras de agradecimiento que alcancen. Nos sacaron los miedos y nos despertaron sonrisas tipos y tipas que no duermen por horas en plena pandemia, estando ahí, al frente de las desgracias y los miedos”.