Tras 12 años, la familia Bustos Fierro se encuentra nuevamente en Estados Unidos acompañando a uno de sus hijos durante un trasplante de médula ósea. En este caso, Benjamín, de 8 años, fue intervenido este miércoles en Minnesota, en Estados Unidos.
La enfermedad poco frecuente que padece también atacó en 2011 a sus hermanos Agustín y Joaquín, quienes pasaron por el mismo tratamiento en el M. Health Fairview Center for Pediatric de la Universidad de Minnesota. Tras una colecta solidaria, la familia logró recaudar lo necesario para viajar al extranjero.
LA CAMPAÑA SOLIDARIA “TODOS POR BENJA”
A través de la cuenta de Instagram @todosporbenjaa, comenzó en julio de este año una intensa campaña solidaria nacional para recaudar el dinero necesario para el tratamiento. A la causa se sumaron múltiples figuras públicas a nivel nacional. La familia, por su parte, organizó eventos benéficos, repartió folletos por la ciudad capital y en agosto se trasladaron a Buenos Aires para magnificar la difusión.
En septiembre, la familia informó que habían recaudado lo precisado y que el 22 de ese mes viajaban a Estados unidos. Fue así que Benjamín se internó en la Unidad de Trasplante del centro médico de Minnesota el 19 de noviembre, a la espera de la intervención de este miércoles.
El procedimiento no es invasivo ni requiere anestesia, por lo que no llevó mucho tiempo. La etapa más complicada es el postoperatorio, donde estará expuesto a infecciones a causa de la medicación inmunosupresora que se le administra para evitar un posible rechazo del injerto.
“Estamos con toda la expectativa, dejamos todo en manos de Dios. Nos importa el futuro de Benja, que el proceso sea de la mejor forma y que podamos volver al país lo más pronto posible. Agradecemos infinitamente a la gente que nos ayudó y nos acompañó y les pedimos que lo tengan en oraciones. La está peleando solito ahora pero está de buen ánimo y se la está bancando como un grande”, sostuvo Cecilia Bursi, mamá de Benjamín, en diálogo con La Voz.
BUSTOS FIERRO: LA LUCHA CON LA OBRA SOCIAL Y EL ESTADO NACIONAL
Para cubrir los altos costos del tratamiento, los traslados y alojamiento, la familia intentó que su obra social y la Nación afrontaran los gastos. Lo hizo a través de un amparo presentado a fines de marzo. Luego de tres meses, la Cámara Federal de Apelaciones rechazó el pedido de los Bustos Fierro.
El juez federal a cargo de la causa, Alejandro Sánchez Freytes, argumentó que no había razones suficientes para que la intervención se hiciera en el extranjero y que el trasplante podía efectuarse en instituciones públicas o privadas de Argentina. En contrapartida, la familia argumentó que las “posibilidades reales de vida” están en el centro médico norteamericano.