Tras pagar una fianza millonaria, salir y volver a entrar bajo la acusación de violencia de género, el gremialista Pascual Catrambone vuelve a pedir la libertad y queda a la espera de una resolución de la Cámara de Apelaciones de Córdoba, este martes.
Detenido por una causa en la que se lo investiga por su presunto accionar en delitos como lavado de dinero, asociación ilícita, usura y defraudación en perjuicio de los afiliados de su gremio Surbac, mutual y obra social, el dirigente había pagado 10.000.000 de pesos para salir bajo fianza en marzo, pero a las pocas semanas fue ingresado nuevamente a prisión, por una denuncia de violencia de género que le hizo su pareja.
Ahora, Catrambone vuelve a pedir su libertad, aunque en esta oportunidad aun con el contexto de la pandemia de coronavirus, su situación está muy complicada por el hecho de violencia, que le valió una nueva imputación, esta vez por lesiones leves calificadas y privación ilegítima de la libertad.
La semana pasada, había presentado un pedido de prisión domiciliaria en casa de su exsuegra, pero el juez federal Ricardo Bustos Fierro se la negó al entender que Catrambone volvió a demostrar peligrosidad procesal.