Nada como terminar la jornada de trabajo y emprender el regreso a casa para buscar el merecido descanso.
Pero, a veces, nuestros deseos no se condicen con lo que el destino nos marca y algo sucede que trunca nuestros planes y nos hace maldecir a la mala fortuna que nos persigue. O eso creemos.
Dos trabajadores que ya habían finalizado sus tareas y volvían a sus hogares sufrieron algo que desanima a cualquiera: se les quedó la camioneta.
Ocurrió en un country en un sector de la ciudad pero quiso el destino que lo que parecía un día de pesadilla terminara con una sonrisa de oreja a oreja.
Es que por el lugar, y mientras uno de ellos trataba de pechar el vehículo solo mientras el otro manejaba para hacerlo arrancar apareció un alma solidaria que le dijo,"aguantá que te doy una mano".
La sorpresa fue mayúscula cuando vieron a "un pelado" que se ofrecía a ayudarles. Era nada menos que el Cholo Guiñazú.
La anécdota fue contada por uno de los trabajadores en Facebook.
Qué humilde este loco.
Resulta que se nos quedó la camioneta con mi compañero de trabajo, en un country en el que estamos trabajando, y me puse a pecharla solo, mientras intentábamos arrancar pasa este tipo en su camioneta, baja el vidrio y me dice: 'aguantá que te doy una mano'.
Estaciona, se baja y me ayuda; arranco la camioneta y yo le pedí una foto, sé que es un jugador muy famoso y talentoso pero más allá de eso, es un tipo humilde, simple! Así deberíamos ser todos en todos los aspectos, sean humildes locos, lo demás es pólvora! Gracias Cholo Guiñazú!"