En un momento clave de la pandemia de Covid-19, donde la atención sanitaria es fundamental para el bienestar de los vecinos, el dispensario del barrio Río Grande de La Falda, tuvo que lamentar ser víctima del vandalismo.
Desde el municipio, compartieron las imágenes de cómo quedó el lugar y repudiaron los actos de salvajismo ocurridos en la madrugada de este viernes. Entre los daños, adulteraron el tablero de electricidad, cortaron un caño de bronce de la conexión de gas, forzaron ventanas y realizaron pintadas de mal gusto en las paredes del edificio.
"Informamos que el área de Asesoría Letrada Municipal ya realizó las actuaciones correspondiente, llamamos a la sociedad toda a cuidar los establecimientos públicos" expresaron las autoridades desde las redes sociales.