A los 76 años murió el reconocido pintor y escultor Carlos Regazzoni. Su fallecimiento se produjo esta mañana en el Hospital Italiano de la ciudad de Buenos Aires, donde había sido internado las últimas horas producto de una enfermedad con la que venía luchando los últimos meses.
Entre sus obras se encuentra el Bridasaurio, una escultura ideada por la empresa Bridas Sapic en 1997 y que fue construida con desechos metálicos de chatarra, tambores, trépanos, cadenas, bridas y válvulas de la industria petrolera.
El artista dejó vastas obras para la posteridad a lo largo del país y entre ella una en Pico Truncado. De reconocida trayectoria en la Argentina, Regazzoni logró consolidar su reputación como artista en Francia.
Su particularidad consistía en recuperar y trabajar con elementos del ferrocarril caídos en desuso, transformándolos en obras emblemáticas, que hoy se exhiben en distintos museos de Buenos Aires y París.
Regazzoni, padre de 7 hijos nació en Comodoro Rivadavia en 1943. Al poco tiempo su familia se trasladó a la localidad de Longchamps en Almirante Brown, donde permaneció varias décadas. De reconocida trayectoria en la Argentina, Regazzoni logró consolidar su reputación como artista en Francia, dónde vivió por más de 10 años.
Su particularidad consistía en recuperar y trabajar con elementos del ferrocarril caídos en desuso, transformándolos en obras emblemáticas, que hoy se exhiben en distintos museos de Buenos Aires y París.
Regazzoni definía el arte, como la única manera de descubrir la genialidad oculta. Siempre recordaba que comenzó su carrera vendiendo kerosene por las calles de Almirante Brown. La técnica de recuperación de hierros, le valió participar en los 100 años de la historia aeronáutica francesa.
La volación en Champs Elyssés, El «Colosal» en Bariloche, «Bridasaurio» en Pico Truncado, el malón, Rancho de los Esteros y La flota de aviones, son algunas de sus recordadas obras. De vuelta en la Argentina, se fue a vivir frente al barrio popular 31 de retiro, a un vagón de tren dónde montó un atellier e instaló el restaurante gato viejo, que el mismo atendía y cocinaba.