Después de que un juez a través de un fallo obligó al Sanatorio Otamendi a suministrarle dióxido de cloro a un paciente con coronavirus, el hombre finalmente falleció este lunes. El tratamiento había sido solicitado ante la Justicia Federal por los hijos y el médico del paciente, llamado Oscar García Rúa.
El hombre estaba internado en el Sanatorio Otamendi y la decisión fue del juez federal subrogante Javier Pico Terrero. La institución había apelado la medida, ya que se trata de una sustancia que puede ocasionar graves problemas de salud y que no posee la autorización de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat).
Según informó Clarín, el hombre de 92 años falleció después de que le aplicaran el tratamiento. “Luego de aplicación, el paciente empeoró en lo respiratorio y murió a las 24 horas”, informaron desde el sanatorio.
El fallo puso en alerta a la comunidad médica, debido a que la decisión judicial podría sentar jurisprudencia para recetar tratamientos que no están autorizados por las entidades regulatorias correspondientes.
Para tomar dicha decisión, el juez federal subrogante consideró que “la cobertura de los tratamientos indicados no ocasionaría un grave perjuicio para la demandada, pero evita, en cambio, el agravamiento de las condiciones de vida de la actora”. Asimismo, teniendo en cuenta que la terapia la recetó el neurocirujano personal del paciente, determinó que el sanatorio porteño deberá “garantizar la implementación de los tratamientos prescriptos por su médico tratante”.
Sin embargo, el abogado de la familia del paciente, Martín Sarubbi, al confirmar la noticia al medio C5N dijo que la causa de la muerte fue una infección intrahospitalaria. “No termina falleciendo a causa del Covid-19, sino por una infección intrahospitalaria. Fallece por una demora”, dijo el letrado y afirmó que presentarán una denuncia contra el Sanatorio Otamendi.
“El sanatorio siguió dilatando el tratamiento. La realidad es que el dióxido no está prohibido. La Anmat lo desaconsejó, pero no lo prohíbe”, concluyó el abogado.