El Gobierno porteño y los Metrodelegados llegaron a un acuerdo para suspender todo tipo de medida de fuerza y garantizar la previsibilidad en la relaciones laborales, según consignó Infobae.
"La calidad y la eficiencia del servicio, como la protección laboral, son prioritarias", reza el acuerdo al que tuvo acceso el medio. Los metrodelegados se comprometieron a no realizar acciones que interrumpan el servicio tanto de las seis líneas de subtes como el Premetro.
La empresa y los sindicalistas ratificaron el compromiso de "respeto mutuo" y de promover el diálogo entre ellos, para evitar cualquier tipo de situación que afecte el normal funcionamiento del servicio y perjudique a los usuarios.
Los Metrodelegados se comprometieron a "no adoptar medidas de acción directa ante cualquier conflicto que se pueda suscitar o se genere, sin el previo procedimiento que incluye reuniones por el plazo de 15 días. En caso de que no se resuelven los conflictos originados, y antes de tomar algún tipo de medida de fuerza, el gremio "deberá preavisar en forma fehaciente con una antelación no menor a cinco días la medida a adoptar".
"En el supuesto de que las partes hayan cumplido con las obligaciones precedentes y la falta de resolución del conflicto determine la adopción de medidas de acción directa por parte de los metrodelegados, ésta ejercerá las mismas en el marco de la normativa vigente, evitando en lo que esté a su alcance, que la circulación de los trenes se vea impedida por obstaculizar en las vías andenes o cabinas", dice el acuerdo.
El compromiso alcanzado regirá hasta diciembre de 2019, pudiendo las partes renovarlo a su vencimiento, en las mismas o con diferentes condiciones presentes.