La comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides dijo en una entrevista que sostuvo con el diario alemán “Augsburger Allgemeine” que, según sus previsiones, la Unión Europea recibirá al menos 700 millones de dosis hasta finales de septiembre, “más que suficiente para vacunar al 70% de la población de la Unión”.
Estima también Kyriakides que para finales de junio serán ya 300 millones de dosis, que podrían ser más cuando se añadan las vacunas de la farmacéutica belga Jansen que produce Johnson & Johnson. Esos cálculos hacen, según fuentes comunitarias explicaban este lunes, que la Unión Europea no necesite comprar la vacuna rusa, Sputnik V y que la Comisión Europea haya tomado ya la decisión de descartar su adquisición.
Las mismas fuentes cuentan que por ahora ni siquiera se trata de una decisión política –Bruselas siempre ha creído que la vacuna rusa es una vacuna pero también un arma política del presidente ruso Vladimir Putin- porque los rusos ni han pedido autorización a la Agencia Europea del Medicamento.
Sin esa autorización no habrá Sputnik V en Europa. La decisión no es oficial pero las fuentes consultadas por una investigación realizada por diario “Clarín” aseguran que no se comprará.
Hace unas semanas, cuando el atraso en la producción de la vacuna Astra Zeneca ponían en vilo a todo Europa, varias países empezaron a insinuar que la Unión Europea podría comprar la vacuna rusa. Logísticamente tenía sentido si Rusia era capaz de suministras decenas de millones de dosis o permitir que farmacéuticas europeas fabricaran la vacuna.
Una serie de laboratorios alemanes estudiaban esa opción porque uno de los requisitos que el Ejecutivo europeo pone a las farmacéuticas es que puedan producir sus dosis en territorio europeo, algo que por ahora Rusia es incapaz de hacer porque no tiene acuerdos con plantas farmacéuticas europeas.
El ministro de Exteriores francés Jean-Yves Le Drian dijo que “las vacunas no tienen nacionalidad”, mientras gigantes franceses como Sanofi o el Institut Pasteur no han conseguido idear su propia vacuna.
Durante su visita a Moscú, el Alto Representante para la Política Exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, felicitó a Moscú por haber ideado una vacuna que según la revista científica “The Lancet” tiene una efectividad superior al 90%. Borrell llegó a decir que la Sputnik V era “un bien para la humanidad”. Borrell no discutió sobre vacunas con su homólogo ruso Serguei Lavrov y fuentes comunitarias explicaron tras el viaje que se trató únicamente de un cumplido de cortesía.
Bruselas descarta la compra pero varios gobiernos no estarían tan de acuerdo. Así, el Ejecutivo austríaco del primer ministro conservador Sebastian Kurz dijo que su Gobierno podría comprar vacunas rusas si estas se produjeran en Austria. Y el Gobierno checo adelantó este fin de semana que sí le interesaría recibir vacunas rusas.