Los dirigentes de Juntos por el Cambio, Patricia Bulrrich y Alfredo Cornejo indicaron que es necesario abandonar la moderación en su espacio político, como “freno muy fuerte a los embates” del kirchnerismo. Tras la carta del expresidente Mauricio Macri con duras críticas al Gobierno de Alberto Fernández.
La postura que tomaron ambos dirigentes de la oposición se opone al pedido de moderación realizado por al líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió. La principal aliada de Mauricio Macri viene tomando distancia de las últimas marchas y banderazos contra el Gobierno, e indicó que la Coalición Cívica se mantendrá dentro de Juntos por el Cambio para “ganar elecciones y corregir errores”.
Por su parte, Patricia Bullrich descartó cualquier instancia de diálogo con un Presidente que “se ha sometido a un modelo político del kirchnerismo más duro” y que “ha actuado de manera unilateral”; y cuestionó el recorte de fondos de la coparticipación para la Ciudad de Buenos Aires, defendiendo al jefe de Gobierno porteño y asegurando que Juntos por el Cambio tiene que ser el “freno” antes estas “amenazas”.
“El kirchnerismo duro hoy está amenazando nuestro sistema constitucional argentino, y frente a esa amenaza todos reaccionamos de manera similar. Estamos representando un freno muy fuerte a los embates contra la Justicia, la propiedad, contra la libertad”, manifestó la exministra de Seguridad.
En este contexto, expresó que “queda cada vez más reducida” la idea de “un posible diálogo con el Gobierno” de Alberto Fernández, y afirmó que el Ejecutivo nacional “decidió tomar a la Ciudad como enemigo”. “La realidad es que el Presidente se ha sometido a un modelo político del kirchnerismo más duro. Esta idea de que podríamos tener un posible diálogo con el Gobierno queda cada vez más reducida, porque el Gobierno ha actuado de manera unilateral”, comentó Bullrich.
“Estamos todos en la defensa de la Ciudad y de Horacio Rodríguez Larreta. Acá hay un ataque a nuestro Gobierno y a todos aquellos que pertenecemos a la oposición. Esta decisión permanente del Gobierno de construir un enemigo, que en este caso somos nosotros”, remarcó.
Siguiendo esta línea, el ex gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, manifestó en declaraciones radiales que “al kirchnerismo le importa tres pepinos los planteos de los dirigentes moderados. Nuestro papel de alternancia es construir un discurso, un análisis de la realidad, que tenga valores distintos a los de las locuras ideológicas del kirchnerismo”.
Ante esta situación, pidió que estén “firmes ahí, Patricia, Horacio (Rodríguez Larreta), los gobernadores, los líderes de los bloques parlamentarios, los presidentes de los partidos”, porque “se está preparando, alfombrando, un proceso de juicio político a la Corte Suprema y una reforma constitucional”.
“Si el Gobierno triunfara en las elecciones legislativas de 2021, estoy seguro de que iría por la agenda de Cristina Kirchner, es decir, de una reforma judicial para terminar con la independencia del Poder Judicial”, puntualizó y adelantó que durante los próximos meses se va a ir construyendo “un clima hostil contra la Corte y el Poder Judicial en su conjunto”.
El titular de la UCR señaló que el “contramensaje” de Juntos por el Cambio “debe ser explicarle a la ciudadanía que no es natural que la vicepresidenta y el Presidente quieran manejar fallos de la Corte y que el Poder Judicial no sea independiente y haga su tarea de equilibrio de poder”.
En cuanto a la posibilidad de ampliar Juntos por el Cambio, tanto Bulrrich como Cornejo se mostraron dispuestos, pero destacaron que deben contar “con valores y con solidez” compartidos por el espacio político. “Nuestra selección (de candidatos) tiene que ser muy cuidada”, señaló la titular del PRO, mientras que el dirigente radical señaló que deben tener “valores distintos a los de las locuras ideológicas del kirchnerismo”.