En las últimas semanas lo venían conversando, pero en la última reunión de gobernadores, realizada en la Casa de Entre Ríos la semana pasada, ya se tomó la decisión definitiva: el PJ y el massismo confluirán en un único interbloque de diputados, que se llamará Alternativa Argentina.
Los 33 integrantes de Argentina Federal, el interbloque justicialista, y los 16 del Frente Renovador, se integrarán en un espacio de 49 bancas, que de esta manera será la tercera fuerza de la Cámara de Diputados, detrás de Cambiemos (108 integrantes) y el Frente para la Victoria (65).
El interbloque Argentina Federal responde a nueve gobernadores, de los cuales ocho son del PJ: el cordobés Juan Schiaretti, el tucumano Juan Manzur, el sanjuanino Sergio Uñac, el entrerriano Gustavo Bordet, el salteño Juan Manuel Urtubey, el riojano Sergio Casas, el chaqueño Domingo Peppo y el pampeano Carlos Verna.
El restante es el misionero Hugo Passalaqcua, de una coalición provincial de extracción radical.
El interbloque Frente Renovador, a su vez, es presidido por Graciela Camaño y responde directamente a Massa, quien desde hace unos meses integra junto a Schiaretti, Urtubey y el senador Miguel Pichetto el cuarteto que aspira a generar una opción de poder intermedia entre Cambiemos y el kirchnerismo.
Negociaciones
El jefe del interbloque Argentina Federal de Diputados, el salteño Pablo Kosiner, tiene previsto reunirse en las próximas horas con Camaño, para ultimar los detalles de la fusión.
En el peronismo entienden que en la conducción de este nuevo espacio integrado debería continuar Kosiner, ya que Camaño obtuvo un lugar en el Consejo de la Magistratura gracias al PJ, en acuerdo con el kirchnerismo.
El espacio sí deberá definir su perfil institucional: Argentina Federal es considerada una bancada dialoguista, con la que Cambiemos negocia todas las leyes. En cambio, el Frente Renovador se ubicó en este último período parlamentario en la oposición más dura, junto con el Frente para la Victoria.
Tanto en el massismo como en el peronismo entienden que la decisión de conformar este macroespacio en la Cámara Baja les otorgará mayor visibilidad política en un contexto de polarización y, en lo institucional, un mayor volumen político para negociaciones con Cambiemos.
Además, le servirá a Massa para salir del lugar debilidad en que quedó tras el alejamiento del Frente Renovador de Felipe Solá, Facundo Moyano y otros tres diputados más, quienes se integraron a un interbloque filokirchnerista.
Según pudo averiguar VíaPaís, el espacio podría crearse por nota dirigida al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, en los próximos días, antes de la sesión preparatoria prevista para el miércoles 5 de diciembre, día en que serían reelegidas por consenso todas las autoridades del cuerpo.
La caída del tigrense
Según pudo averiguar VíaPaís, Massa, con Diego Bossio como principal articulador, era el principal interesado en la conformación de este interbloque con el peronismo, tras la fuga de cinco diputados.
El exintendente de Tigre ya no es más el hombre fuerte de la oposición que supo ser siendo diputado nacional, entre 2013 y 2017, y candidato a presidente, en 2015, cuando sacó 5,4 millones de votos y terminó tercero, con el 21%, detrás de Daniel Scioli y Mauricio Macri.
Entre 2013 y 2015, el primer período legislativo con Massa ya fuera del Frente para la Victoria, el Frente Renovador contó con 18 diputados nacionales.
Entre 2016 y 2017, el interbloque massista, Unidos por una Nueva Argentina (UNA), creció a 37 integrantes. Su apoyo fue clave Cambiemos, para poder sancionar, entre otras leyes, la del pago a los holdouts y la de reparación a los jubilados.
Inclusive, por su esquema de alianzas (en Córdoba con José Manuel de la Sota, en Chubut con Mario Das Neves y en Tierra del Fuego con Rosana Bertone), Massa contó con un bloque de tres senadores nacionales: Carlos Caserio, Alfredo Luenzo y Miriam Boyadjian.
Pero en las últimas elecciones legislativas el tigrense terminó tercero como candidato a senador por la Provincia de Buenos Aires, detrás de Cristina Kirchner y Esteban Bullrich, con 1 millón de votos (11%).
Con ese flojo desempeño electoral, con el que cosechó apenas cuatro bancas de diputado, el interbloque massista de la Cámara baja se redujo de 37 a 21 miembros.
Ahora, con las partidas de Solá, Moyano, Fernando Asencio, Jorge Taboada y Daniel Arroyo, quedó con 16 de los 257 diputados.