Hernán Caire estuvo internado y fue intervenido quirúrgicamente por una infección en el pulmón, que según los médicos que lo atendieron "estuvo al borde la muerte". "Dios tenía mi DNI en la mano, pero me lo devolvió", fue lo primero que dijo Caire.
En una entrevista con la revista Pronto, contó que todo empezó cuando le salió un herpes en la boca y que esta vez los medicamentos no le hacían efecto. "Me empezó a crecer cada vez mas hasta que el labio quedó explotado. A los cuatro días lo llamé a mi amigo Agustín Alí, que es médico, y me dijo que lo fuera a ver al Sanatorio Los Arcos. Ahí me dio una inyección y la inflamación me bajó. Era sábado, así que a la noche me fui a trabajar", dijo.
Continuó: "Empecé con 39 grados de fiebre. El domingo el médico me pidió que fuera a verlo a la Clínica Zabala, donde también atiende. Me dijo que iban a hacer un cortecito para expulsar todo lo feo que tuviera adentro del labio y que con eso, ya iba a estar bien. Fui dispuesto a volverme a casa en un rato. Pero cuando me cortó, no salió nada. Estaba en la camilla sin entender que pasaba. Hasta que me dijeron 'no te vas'".
Después de vario análisis, le explicaron que tenía una bacteria que había ingresado por la herida del labio. "A la semana decidieron intervenirme quirúrgicamente. Me abrieron por el lado de las costillas con un tajo de unos veinte centímetros, para meter una camarita e ir inflando y desinflando el pulmón y así poder ir sacando toda la infección", contó.
"Pensé mucho en mi hija. Para ella, yo soy como un superhéroe. Así que todas las noches yo rezaba pidiéndole a dios que dejara ir del sanatorio de la mano de Valen hasta que ella fuera mayor, que me permitiera verla crecer", agregó.
El modelo cerró: "Tengo que ir más relajado, que no me tengo que hacer problema por tantas cosas. Vamos a diez mil por hora. Y en lugar de disfrutar de lo que realmente es importante como la familia y los amigos, nos preocupamos por pavadas. Cuando la verdad es que estamos de paso por este mundo".