Indonesia: recibieron 84 azotes por ser homosexuales

El castigo fue impuesto por la ley islámica que rige en ese país. 

ACEH (INDONESIA)
ACEH (INDONESIA)

Una transexual y un hombre recibieron hoy cada uno 84 azotes en público por un delito de sodomía en la provincia de Aceh (oeste). Es en el único lugar de Indonesia donde rige la ley sharia o islámica. Las dos personas fueron azotadas en el exterior de una mezquita de Banda Aceh -capital provincial- y se obligó a la transexual a vestir ropa masculina.

La pareja fue detenida en abril en una peluquería. Unos ciudadanos que se consideran "justicieros" acusaron a la transexual y a su cliente de mantener relaciones homosexuales. Fueron condenados a 87 azotes, aunque le dieron 84 por haber permanecido tres meses en prisión. En mayo del año pasado, otra pareja recibió 83 azotes por cabeza.

Esta es la segunda vez que dos personas son condenadas en Aceh por sodomía, tipificada como delito en la legislación islámica de la provincia Aceh desde 2014 y penado con hasta 100 golpes.

Bastonazos en publico en la provincia del país donde rige ley islámica
Bastonazos en publico en la provincia del país donde rige ley islámica

El investigador para Human Right Watch en el país asiático, Andreas Harsono, dijo que la práctica viola los tratados internacionales sobre derechos fundamentales firmados por Indonesia. Y agregó: "El presidente de Indonesia, Joko Widodo, necesita empezar el proceso para reformar el discriminatorio código penal de Aceh".

Aceh comenzó a regirse por la sharia a comienzos del 2000 como concesión del Gobierno central para que ese antiguo sultanato abandonase sus aspiraciones independentistas. Sin embargo, en abril, el Gobierno provincial anunció que los azotes se realizarán en las cárceles y no en público, pero hasta el momento solo tres municipios lo implementaron.

En enero, un jefe de la policía de la sharia arrestó a 12 transexuales, les cortó el pelo y les obligó a realizar ejercicios para "volver a la normalidad".

Organizaciones civiles y activistas denunciaron la represión de la comunidad LGTB en el resto de Indonesia, el país con mayor población musulmana del mundo.