¿Qué futuro se perfila para los clubes catalanes en las ligas españolas en caso de una independencia de Cataluña? El Barcelona, el más poderoso de ellos, se debate entre lo que dice la legislación española y la necesidad económica de seguir en una competición de alto nivel.
Cataluña, un referente del deporte en España, cuenta con tres clubes de fútbol en Primera División (FC Barcelona, Espanyol y Girona) y tres en Segunda División (el filial del Barcelona, el Gimnástic de Tarragona y el Reus), así como varios más en la tercera División.
La Ley del deporte español especifica que ningún club de Estados extranjeros puede jugar en ligas españolas, salvo los de Andorra.
El artículo 32 de esta ley establece que para que los clubes puedan participar en "actividades o competiciones deportivas oficiales de ámbito estatal o internacional" deberán "integrarse en las Federaciones deportivas españolas correspondientes".
Este artículo supone que si la Federación Catalana de Fútbol (FCF) abandonara el paraguas de la española, los clubes catalanes tendrían que dejar la Liga... salvo que se produjera una reforma de la ley española.
El Barcelona o los clubes catalanes de fútbol no serían inmediatamente expulsados de las competiciones españolas. Según Alberto Palomar, doctor en derecho y experto en legislación deportiva, la ley catalana "de transitoriedad", que debería regir durante el camino a una hipotética independencia, prevé mantener la legislación española compatible con el nuevo orden hasta la proclamación de una supuesta nueva constitución catalana.
Esto afectaría a la ley del Deporte español, que, por otra parte, vista desde el lado estatal, también podría seguir aplicándose, ya que el Tribunal Constitucional ha suspendido la ley de transitoriedad y por tanto, no se le reconoce efectividad.
El presidente de la Liga española, Javier Tebas, partidario hasta ahora de la línea dura, declaró la semana pasada que en caso de una declaración de independencia citará a los clubes catalanes "para que me den su opinión sobre lo que está pasando".
"Creo que no habrá una ruptura inmediata", añadió Tebas, que dejó entrever que la actual Liga podría seguir hasta el final.
Por otro lado, a nivel deportivo surgiría el problema de a qué nivel incluir al Barça. ¿Directamente en Primera División, en perjuicio de las reglas ascenso-descenso?
Quedaría la opción de un campeonato catalán devaluado y que tendría que ser reconocido por la UEFA para poder acceder a la Liga de Campeones.