El personal doméstico, al igual que el resto de los trabajadores, tiene derecho a gozar de las licencias anunciadas por el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, para evitar la propagación del coronavirus. De esta forma, las personas que desempeñen tareas en casas particulares deben recibir el pago de su remuneración habitual.
Según lo estipulado por el Gobierno, están comprendidos todos los trabajadores mayores de 60 años que no sean considerados "personal esencial".
Asímismo, las personas menores de 60 años que no integra los grupos de riesgo, o que no tengan menores a su cargo en edad escolar y que trabajan en hogares para personas mayores de esa edad, no cuentan con la licencia obligatoria y ésta será optaiva para el empleador.
Por esa razón, Matías Isequilla, abogado laboralista y asesor de organizaciones sindicales ante la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares, manifestò en diàlogo con Clarín que “el trabajo doméstico se presta casi invariablemente en hogares o casas particulares, no se ha dictado resolución alguna que exima a las trabajadoras domésticas de concurrir a sus lugares de trabajo en los casos en los que sus empleadores o algún miembro de su familia y/o grupo conviviente se encuentran en cuarentena y/o integran los grupos de riesgo”.
Según el INDEC, hay 1.730.000 puestos de trabajo, de los cuales 515.000 están registrados ante la Seguridad Social y 1.214.000 trabajan en la informalidad. De los registrados, son 45.221 los mayores de 60 años.