Unas 2,2 millones de personas ya fueron incluidas por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) al universo de los contribuyentes que pagan el impuesto a las Ganancias, un 16,23% más que el año pasado y un 84,57% más que en diciembre de 2015.
Así lo señaló la jefatura de Gabinete de ministros, que conduce Marcos Peña, en el informe 119 remitido al Congreso, previo a la próxima presentación del funcionario en la Cámara de Diputados.
Los datos aportados por el Gobierno indican que, según el ministerio de Hacienda, en enero de 2019 se vieron afectadas por Ganancias unas 2.129.702 personas; en febrero fueron 2.211.930; y en marzo, 2.169.593.
Los datos oficiales también indican que en marzo de 2018 el impuesto a las Ganancias afectaba a 1.866.568 personas. Por ello, en los doce meses transcurridos y a pesar de la crisis económica, se registró un aumento del 303.025 personas, es decir, 16,23%.
El pico máximo de personas que pagaron ganancias se dio en diciembre del año pasado, cuando el tributo afectó a 2.219.616 personas. La pérdida de puestos de trabajo por la crisis y la posterior modificación de las escalas de la cuarta categoría redujeron ese número, que cerraría el 2019 aún más abajo.
Tras perder en las elecciones primarias del 11 de agosto, el presidente Mauricio Macri anunció varias medidas con las que busca morigerar el impacto que tendrá sobre los argentinos la devaluación y el rebrote inflacionario.
Una de las medidas fue recortar el impuesto a las ganancias personales. Se subió un 20% el piso a partir del cual los empleados pagan el impuesto a las Ganancias. Esto tendrá un impacto significativo en el universo de personas afectadas por el impuesto hacia el final de su mandato.
El impuesto a las Ganancias es, coinciden tributaristas y economistas, el tributo más "justo", "progresivo" y "redistributivo" por la concepción de solidaridad de los que mejores ingresos tienen sobre aquellos que cuentan con recursos escasos.
Pero “eliminar este impuesto” para trabajadores en relación de dependencia y autónomos había sido una de las propuestas centrales de la plataforma electoral de Macri en la campaña presidencial de 2015, pero ocurrió todo lo contrario.
El aumento de la presión tributaria se registró sobre lo que se entiende por ganancias de cuarta categoría a los ingresos que se obtienen como resultado del trabajo personal en relación de dependencia, o en forma autónoma con el ejercicio de profesiones liberales.
Y esto se dio con un proceso paralelo de caída real de los salarios por el impacto de la inflación, dado que las negociaciones paritarias –al menos de algunos sectores- se fueron cerrando por debajo de la suba generalizada del costo de vida.
Si se observan datos del ministerio de Hacienda de 2015, ratificados por la actual gestión, en diciembre de aquel año pagaban Ganancias 1.175.478 personas. En marzo de 2016, sólo cuatro meses después, el tributo ya afectaba a 1.429.169.
Así, entre diciembre de 2015 y el mismo mes de 2018 el universo de personas afectadas por el impuesto a las Ganancias saltó un 88,83%, es decir, pasaron a pagar 1.044.138 personas que antes no estaban afectadas.
Por otro lado, desde que Macri asumió hasta marzo de 2019 (último dato puesto a disposición por Peña) el salto en el universo de personas afectadas fue del 84,57%, es decir, 994.115 personas.
Por la corresponsalía de Buenos Aires.